Cuatro días después de ganar la medalla de bronce en los 1.500 m en el Centro Acuático, el alemán Florian Wellbrock fue el más rápido en los 10 km en aguas abiertas de los Juegos Olímpicos Tokio 2020, disputados en la bahía de Odaiba, tras cubrir la distancia en 1h48:33.7.
La medalla de plata fue para el húngaro Kristof Rasovszky, con 1h48:59.0, y el bronce para el italiano Gregorio Paltrinieri, con 1h49:01.1.
El triunfo de Florian Wellbrock marca varios hitos en la natación de larga distancia.
Es el segundo deportista en la historia que gana medallas en la piscina y en las aguas abiertas en los mismos Juegos Olímpicos; el primero fue el tunecino Oussama Mellouli, con los mismos resultados que el germano: bronce en 1.500 y oro en maratón, pero en Londres 2012.
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El británico Dadid Davies también logró doble podio pero en Juegos Olímpicos diferentes: bronce en 1.500 en Atenas 2004 y plata en aguas abiertas en Pekín 2008.
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Florian Wellbrock, de 23 años, es además el primer nadador que se impone en los 10 km olímpicos siendo campeón del mundo en ejercicio.
Al ganador del oro en esta distancia en los Juegos Olímpicos de Río, el neerlendés Ferry Weertman, no se le dieron tan bien las aguas de la bahía de Odaiba como las de la playa de Copacabana y terminó en la séptima posición.
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