Caterine Ibargüen le trajo suerte a Pedro Pablo Pichardo, nuevo campeón del salto triple de los Juegos Olímpicos Tokio 2020. La colombiana estuvo en la tribuna haciendo fuerza por el nuevo medallista de oro.
Pedro Pablo Pichardo es hijo de Jorge Pichardo, entrenador de Caterine Ibargüen, razón por la que la colombiana estuvo en la tribuna apoyando a su amigo y compañero de prácticas.
Pedro Pablo Pichardo, nacido en Cuba pero que representa a Portugal desde 2019, consiguió el mayor éxito de su carrera deportiva al proclamarse campeón olímpico en el salto triple de los Juegos Olímpicos Tokio 2020.
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Pedro Pablo Pichardo, de 28 años, llegó hasta 17,98 metros y estableció un nuevo récord de Portugal, superando en el podio de la prueba al chino Zhu Yaming (17,57 metros) y al burkinés Hugues-Fabrice Zango (17,47 metros).
En ausencia por una lesión del dominador de la disciplina, el estadounidense Christian Taylor, dos veces campeón olímpico y cuatro veces campeón del mundo, Pedro Pablo Pichardo aprovechó para subir por fin al escalón más alto del podio.
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El triplista, nacionalizado portugués en 2017 y autorizado a competir en grandes eventos por el país europeo desde dos años más tarde, consiguió cuando competía con Cuba dos medallas de plata mundiales, en Moscú-2013 y Pekín-2015.
Ya representando a Portugal, Pedro Pablo Pichardo se quedó cuarto hace dos años en el Mundial de Doha.
La mejor marca de Pedro Pablo Pichardo sigue siendo la conseguida en 2015 en La Habana con 18,08 metros, lo que le convierte en el cuarto hombre que más lejos ha llegado en el triple salto.
En los Juegos Olímpicos, Pedro Pablo Pichardo participaba por primera vez después de perderse en el último momento la edición de Rio-2016 debido a una lesión mal curada en opinión de los médicos cubanos, algo que terminó de convencerle para su salida de la isla y la búsqueda de un nuevo futuro en Europa.
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