Después de haberse impuesto 25-5 sobre la croata Kristina Tomić, en la ronda previa, Andrea Ramírez saltó por segunda ocasión en los Juegos Olímpicos, en busca de un cupo a las semifinales.
La motivación era enorme y con justa razón, la boyacense, de 22 años, quería hacer historia y regalarle una alegría al país. Para ello, primero, debía superar a la la turca Rukiye Yıldırım.
El inicio no fue nada fácil para la colombiana. En el primer round, cayó 7-12. A pesar de los intentos de Ramírez Vargas, su rival se mostró fuerte y con golpes contundentes se fue arriba.
Sin embargo, Andrea aprendió la lección. Para el segundo parcial, si bien continuó abajo en el marcador por 17-19, todo fue más parejo. La ganadora se definiría en el tercero y último.
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Allí, Andrea Ramírez no bajó la guardia, siguió siendo agresiva, pero sin dejar la defensa de lado. Dicha estrategia parecía dar resultado, pero no alcanzó, ya que perdió 30-31.
Ahora, se aferraba a una victoria de la turca Rukiye Yıldırım sobre la española Adriana Cerezo, en semifinales, para tener derecho al repechaje. Sin embargo, no se hizo el milagro y Andrea Ramírez se despidió de Tokio.