Ricardo Prasel fue un arquero con gran proyección al inicio de su carrera deportiva, pero una lesión lo obligó a colgar los guayos cuando todavía era muy joven. El brasileño no desistió y encontró una nueva pasión: la MMA (Artes Marciales Mixtas). El fin de semana pasado debutó con victoria en la KSW, la liga más importante de este tipo de combate a nivel europeo.
Prasel hizo parte de las inferiores del Atlético Paranaense y su talento fue rápidamente reconocido por grandes clubes del 'viejo continente'. En el 2009, el Chelsea de José Mourinho se hizo con sus servicios y con tan solo 18 años viajó al club de Londres.
"Mi tiempo en el Chelsea fue mágico e inolvidable. Didier Drogba y Michael Ballack se quedaban conmigo tras los entrenamientos. No se perdían ni un día. Drogba era simplemente imparable", afirmó el brasileño.
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Duró una temporada en el club londinense y se marchó a Bélgica. En dicho país, jugó en el Eupen y en el Lieja sin gloria ni pena. Después le llegó una inesperada llamada por parte del Atlético Madrid, cuando se encontraba en Brasil esperando una nueva oportunidad.
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"En un entrenamiento con el equipo B del Atlético de Madrid en un campo sintético me lesioné. Era un campo muy pesado y como era alto, me causó mucho impacto en las caderas. Empecé a desanimarme", contó Prusel.
Después de esta lesión decidió concluir definitivamente su carrera futbolística. Fue entonces, cuando empezó a desarrollar sus habilidades en el jiu-jitsu. Prusel estuvo cerca de aterrizar en la UFC en el 2019, pero una derrota retardó este importante paso. Actualmente, tiene 31 años y espera seguir evolucionando en el octágono.