Después de su destacada actuación en la contrarreloj, donde se llevó a casa la medalla de bronce, Wout van Aert tiene sus ojos puestos en un objetivo aún más ambicioso: conquistar el oro en el Campeonato de Europa en ruta. Sin embargo, el líder belga no está solo en esta tarea. Comparte el liderazgo con el joven talento Arnaud De Lie, de tan solo 21 años, y la colaboración entre ambos se vislumbra como crucial para lograr la victoria.
En una rueda de prensa previa a la competición, Van Aert destacó la importancia de la comunicación y la honestidad entre ellos en el tramo final de la carrera. "Será importante hablar entre nosotros", expresó Van Aert en el diálogo con los medios de comunicación celebrado antes del Campeonato de Europa en ruta en Drente, Países Bajos.
El ciclista del Jumbo-Visma, conocido por su fuerza y versatilidad en diferentes terrenos, tiene un compañero de equipo igualmente talentoso en Arnaud De Lie, quien es conocido por su impresionante sprint. Ambos ciclistas son velocistas de élite y comparten el liderazgo del equipo belga en esta competición.
De Lie también subrayó la necesidad de sinceridad entre ellos en el tramo final de la carrera. La estrategia y la toma de decisiones basadas en las circunstancias de la competición serán clave para alcanzar el éxito.
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La pregunta de quién es el más rápido en un sprint entre los dos belgas surge inevitablemente. Van Aert recordó con una sonrisa su victoria en un enfrentamiento previo contra De Lie el año pasado en Plouay. Sin embargo, elogió las habilidades de sprint de su compañero, afirmando que Arnaud De Lie podría ser incluso mejor que él en esa faceta. La competencia entre estos dos ciclistas promete ser emocionante y repleta de sorpresas.
El recorrido del Campeonato de Europa en ruta también ha sido objeto de análisis por parte de los ciclistas. Van Aert exploró la montaña VAM el viernes por la tarde y expresó sus impresiones. A pesar de que las subidas en sí mismas no representan un gran desafío para un pelotón profesional, el estrecho camino y las curvas pronunciadas de la subida complicarán las cosas. Van Aert señaló que la diferencia clave podría marcarse en esta sección del recorrido.
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"La meta no está en los adoquines después de la primera pendiente, sino justo después en la siguiente subida. Esto añade un elemento especial a la carrera, ya que los ciclistas deberán enfrentar dos sprints en un corto espacio de tiempo. No pueden esperar hasta la última subida, ya que estarían demasiado lejos", explicó Van Aert.
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