El veterano portugués Rui Costa (Intermarché) fue el vencedor de la 15ª etapa de la Vuelta a España, este domingo entre Pamplona y Lekunberri, tras la cual el estadounidense Sepp Kuss (Jumbo-Visma) continúa con el jersey rojo de líder.
Rui Costa, de 36 años y campeón mundial en 2013, se impuso en el esprint final al alemán Lennard Kämna (Bora) y al colombiano Santiago Buitrago (Bahrain), con los cuales el portugués se había escapado en los últimos kilómetros antes de la meta.
Los tres jugaron al gato y el ratón en el final, observándose con atención y atentos a cada intento de arrancada de los demás. Kämna llegó incluso a no quedar descolgado del trío pese a caerse a tres kilómetros del final.
En esa partida de póker, la experiencia y picardía de Rui Costa fue determinante. Se resistió a dar relevos, se escondió por momento a rueda de sus compañeros de escapada y gestionó a la perfección sus fuerzas para lanzar el ataque final y definitivo.
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Rui Costa, tres veces ganador de etapa del Tour de Francia, llevaba diez años sin llevarse una etapa en una de las grandes rondas del calendario.
"Es muy importante para mí y también para el equipo, estoy muy feliz", comentó el corredor del Intermarché, que firmó así la 31ª victoria de su carrera y la cuarta de este año 2023.
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Los corredores que pelean por la clasificación general permanecieron en el calor del pelotón, sin atacar, y llegaron a tres minutos.
El líder, Sepp Kuss, continúa con una ventaja de 1 minuto y 37 segundos sobre el segundo, el esloveno Primoz Roglic, y de 1 minuto y 44 segundos respecto al danés Jonas Vingegaard, en un podio virtual compuesto 100% por corredores del Jumbo-Visma.
Gesto de Evenepoel con Marruecos
El belga Remco Evenepoel, defensor del título pero muy distanciado en la general por quedar muy descolgado el viernes en la etapa del Tourmalet, estuvo atacando este domingo, intentando repetir el éxito del sábado, cuando ganó con autoridad en un ataque de orgullo en la etapa que terminó en el Puerto de Belagua.
Esta vez no tuvo tanto éxito y no pudo resistir su fortaleza en la última ascensión, la del Puerto de Zuarrarrate, pagando seguramente su desgaste físico del en la víspera y quedando a unos segundos del grupo que entró en cabeza. Entró a dos segundos del podio del día.
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En la presentación de los equipos en la salida de la etapa en Pamplona, Evenepoel y sus compañeros del Soudal-Quick Step subieron al podio protocolario con la bandera de Marruecos, como signo de solidaridad tras el sismo devastador que ha provocado al menos dos mil muertos en el país norteafricano.
"Mi mujer es marroquí, tenemos mucha familia cerca de la región en la que produjeron esas cosas horribles. Era un momento difícil para ella, para su familia y para mí. Es una forma de apoyar al pueblo marroquí después de lo que ha pasado", dijo.
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La Vuelta a España afronta ahora su última semana de competición. El lunes habrá una jornada de descanso en Santander y la siguiente etapa, la decimosexta, será el martes entre Liencres y Bejes (120,5 kilómetros).
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