Soñaba con ser futbolista de alto nivel, pero acabó campeón ciclista y ganador este domingo de la Vuelta. Remco Evenepoel se forjó un físico y un carácter excepcional sobre el césped, pero la bici siempre estaba cerca.
El 24 de marzo de 2017, cuando el joven Remco, de sólo 17 años, anunció su decisión de dejar el fútbol por los pedales, surgió la sorpresa.
Patrick y Agna estaban convencidos de que su hijo sería futbolista profesional. Ya habían invertido mucho en la futura carrera de su hijo, que pasó por los centros formativos de Anderlecht y PSV Eindhoven antes de comprometerse con el FC Malinas.
Desde los 15 años, Remco está en la selección. El camino parece trazado para este defensa central, también capaz de jugar como lateral izquierdo.
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Una media maratón tras un partido
"Era un gran defensa, dotado de una resistencia fuera de lo común. Recorría hasta 12 kilómetros por partido. Increíble a su edad", explica al diario Le Soir Joric Vandendriessche, su entrenador en los Sub-15 belgas.
"Remco tenía también una fuerte personalidad. Lo nombré capitán", recuerda a AFP, Stéphane Stassin, entrenador de los Sub-16 del Anderlecht.
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Con 15-16 años, Evenepoel pulveriza todos los récords de velocidad y resistencia con estadísticas cercanas a jugadores profesionales, recuerda otro formador del club bruselense.
Una anécdota resume de maravilla el carácter excepcional del joven Remco: En octubre de 2016, cuando participaba en la media maratón de Bruselas, Stassin es adelantado por su joven jugador.
POV: Acabas de ganar #LaVuelta22
— La Vuelta (@lavuelta) September 11, 2022
POV: You have just won La Vuelta @EvenepoelRemco - @qst_alphavinyl pic.twitter.com/R3OaiFaJ6m
"Vi pasar algunos keniatas y después al joven Remco que debía ir séptimo u octavo. Habíamos jugado la víspera y había pedido a los jugadores que descansaran. Pero parece que tener un partido entero en las piernas no le molestaba para correr una media maratón...", afirma.
A sus 16 años, Remco acabará 13º en una hora y 16 minutos a ocho minutos del vencedor keniata.
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Pero, aunque el joven jugador tiene capacidades atléticas excepcionales, adolece de técnica y sobre todo, de explosividad. Anderlecht se lo hará entender antes de dejarlo marchar al Malinas.
Más tarde, Remco afirmará haberse sentido "roto" por el club de su corazón.
EL QUE GOZA SIEMPRE GANA 😏
— ESPN Ciclismo (@ESPNCiclismo) September 11, 2022
Así festejó Remco #Evenepoel al llegar a la meta junto con su mujer y su equipo. #ESPNCiclismo pic.twitter.com/aBjxWgRpAH
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50 km con cinco años
Tal vez ofendido, el joven flamenco va pronto a cambiar de rumbo.
El 24 de marzo de 2017, tras su jornada como obrero, su padre Patrick Evenepoel se da cuenta de que su bici no está en el garaje. La razón: Remco se fue "a dar una pequeña vuelta". 117 km a 34 km/h de media hasta el mítico muro de Grammont, dice su padre, mostrando orgulloso el GPS de su bicicleta.
Ese día anuncia a sus padres su deseo de dedicarse al ciclismo.
El mundo del ciclismo no es nuevo para el adolescente. Su padre fue profesional durante cuatro temporadas. Tras su anuncio, Patrick prepara la bici de su hijo para su primera carrera.
¡Liquidó todo el domingo y festejó! Remco Evenepoel se coronó CAMPEÓN de #LaVuelta22 por primera vez. El colombiano Juan Sebastián Molano firmó una excelente jornada ganando la etapa 21. pic.twitter.com/2zUOWAVow1
— SportsCenter (@SC_ESPN) September 11, 2022
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Remco, con permiso de un día, disputa su primera prueba el 2 de abril de 2017 en el Brabante Flamenco, el día que su compatriota Philippe Gilbert gana la Vuelta a Flandes.
Ya nada ni nadie detendrá a Remco, convertido hoy en "El Fenómeno", lo que no sorprende a su abuelo materno Eduard con el que el vencedor de la Vuelta tiene una gran relación.
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"Con cinco años me acompañó al Gordel (un ruta ciclista en torno a Bruselas). Quiso rodar los 50 kilómetros. Apenas paró dos veces. ¡Un loco! le habíamos quitado los ruedines a su bici hacía apenas un mes", recordaba el abuelo hace unas semanas en el rotativo La Dernière Heure.
Una prueba, una más, de que el vencedor de la Vuelta, de 22 años, estaba hecho para brillar sobre la bici más que sobre el césped.