La etapa 17 del Tour de Francia 2023 seguramente no será bien recordada por Tadej Pogacar, quien sintió el golpe de una caída, se quedó sin fuerzas y, prácticamente, le dio vía libre a Jonas Vingegaard para que se corone campeón el próximo domingo. Si bien es una gran noticia, el Jumbo Visma no celebra y está lejos de alegrarse por el bajonazo de su principal rival.
Luego de culminar el trazado de este miércoles, que además estuvo pasado por cuatro puertos de montaña, Merijn Zeeman, director deportivo del Jumbo Visma, fue muy sincero sobre lo ocurrido: “Ciertamente no me esperaba esto”, fueron sus primeras declaraciones.
Y es que es muy entendible, pues todos sabían que la lucha era entre el esloveno y el danés, pero en los planes no estaba que las diferencias de tiempo pudieran ser tan amplias. Todo empezó en la contrarreloj del martes, Vingegaard dio cátedra en esta modalidad. “Ayer Jonas toma una gran ventaja, pero Pogačar sigue segundo. Podía ser una obra de teatro, pero ya no se veía tan fresco. Entonces es muy triste para él que se rompa así, pero para nosotros en el juego eso es lindo”, expresó el jefe de filas de la escuadra neerlandesa.
Para Zeeman, el percance de 'Pogy' no pareció tan grave y enfatizó en su bajón pudo llegar por demás factores a esta altura de la competencia. "Creo que esa caída no fue tan mala, pero fue una etapa terriblemente dura y de mucho calor. Es fácil para mí decir que el trabajo de demolición lo ha hecho. Ciertamente le quitamos mucha energía, pero también podría deberse a otras razones”, manifestó.
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Ahora bien, como una señal de juego limpio y demostrando una vez más que, entre ambos ciclistas y equipos, hay colegaje, y que la batalla solo se queda en la carretera y sobre la bicicleta. "No creo que sea elegante alegrarse por esto. Le tenemos mucho respeto como rival, es un gran ciclista. Tal vez se está enfermando”, complementó.
Luego vino su balance y la satisfacción que siente de tener a Vinegaard a un paso de lograr el bicampeonato en el Tour de Francia, logro que además obtendría, tras luchar mano a mano con Pogacar por segunda vez. “Tiene sentido que estemos increíblemente felices de estar en esta posición. Hay tanta tensión en un Tour, entonces me siento muy aliviado”, dijo Zeeman con una sonrisa en el rostro.
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