Egan Bernal está teniendo un Tour de Francia especial y diferencia respecto a lo que está acostumbrado a vivir. En su regreso a las carreras de tres semanas, el colombiano ha tenido que ejercer de gregario para ayudar a los intereses de Carlos Rodríguez y Thomas Pidcock, sus dos compañeros que están en el Top-10, tras el final de la primera semana.
En una charla con el ‘Just Cycling’, el cundinamarqués Egan Bernal contó un poco sobre lo que ha vivido en estos nueve días de acción. También dejó claro que en las once jornadas restantes luchará por entrar en las fugas y buscar la victoria.
*Cómo vivió el día de descanso
"Fue super tranquilo, dormí como hasta las 10 de la mañana y tenía una entrevista. Salimos a entrar una hora y media. Paramos a tomarnos un café, todos estamos muy tranquilos. Masaje, fisioterapia, después viene la cena y a volver a dormir para mañana. Hubiera necesitado un par de días de estos, cuando uno está jodido le urge estas jornadas porque puede tomar un aire para completar los 21 días de carrera".
*Su rol como gregario
"Quiero pensar que a todos les está doliendo las piernas como a mí. Esta gente está corriendo todos los días a full gas. Yo quería estar adelante en la general, pero en el Tourmalet me di cuenta que era inutil porque no tenía: entonces decidí ponerme a tirar. Esto se vive diferente, uno empieza a correr más atrás y desde allí se ve cómo se arriesga la vida. Es un Tour diferente, pero es chevere vivirlo de esta manera".
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*Los comentarios de los aficionados
"Uno entiende a la gente, porque muchos de ellos no saben de ciclismo y están acostumbrados a que estemos adelante. Pero los que entienden de esto, saben que no es fácil y más aún porque ésta es la carrera más dura del mundo. Lo mejor es que con el equipo estamos bien; uno está cuarto y el otro séptimo. Eso es lo bonito de este deporte, a veces uno está en lo más alto, pero en otras se está atrás".
*Su trabajo en el Puy de Dome
"Sentí que me iba a matar, porque toda la bajada había una lucha por el espacio. Cuando uno está metido en la carrera, sabía que ese era mi trabajo y me lo puse como objetivo y lo logré. Con una buena motivación, siempre está dispuesto a arriesgar".
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*Cómo se siente, tras una semana
"Sé puede mirar en los números, pero más allá de eso, es la sensación que tengo. Cuando termina la etapa, me siento bien después de una hora. Al despertar me dan ganas de correr. Me estoy sintiendo mucho mejor que en el Dauphiné, porque se está cogiendo una fuerza especial".
*Su diferencia con Jonas Vingegaard y Tadej Pogacar
"Sí están en otra liga, pero es complicado de medir. Yo lo estoy midiendo desde mi posición, porque me siento cuatro escalones por debajo, pero debo esperar qué tan lejos estoy cuando yo me encuentre en mi mejor nivel. Con las piernas que tengo en este momento, no hay nada que hacer".
*Su ambición en el Tour de Francia
"Yo quiero ir por una etapa, es el objetivo, pero no es solo de piernas. En las fugas es distinto, porque hay que saber entrar. Me gustaría poder intentarlo, pero depende de la suerte. Para coger una fuga está todo el pelotón, todos los equipos quieren meter por lo menos a uno; es por oleadas".