La alemana Ricarda Bauernfeind, del equipo Canyon, fue la ganadora de la quinta etapa del Tour de Francia femenino, que concluyó en Albi y que en vez de marcar un día de transición hacia la montaña volvió a estar marcada por la vigilancia entre las favoritas, que entraron en el grupo delantero.
La corredora alemana tuvo la fortuna de saltar del pelotón en el momento preciso, a menos de 40 kilómetros, y el grupo la dejó hacer, porque la batalla estaba, en realidad, en que ninguna de las primeras clasificadas dejara irse a otra de sus rivales.
Antes, tras el inicio de la etapa, de 126 kilómetros, en Onet Le Chatou se había formado un grupo de unas catorce corredoras en la parte delantera, a las que tras cobrar distancia les fueron pesando las piernas y el grupo en el que marchaban las favoritas se les echó encima en la antepenúltima subida del día, que, como todas, no era excesivamente dura pero tampoco cómoda.
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Cuando los dos grupos se quedaron en uno fue la líder, la belga Lotte Kopecky, la que pareció interesada en acelerar, pero como todas sus rivales respondieron volvió a parar.
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Los acelerones se sucedieron y en uno de ellos Bauernfeind empezó a abrir hueco sin que detrás se hiciera mucho esfuerzo por ir a por ella, porque todas estaban más preocupadas de marcarse entre sí.
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La alemana coronó el último puerto de la jornada, ya en los últimos 15 kilómetros, con más de un minuto de ventaja y sintió que podía llegar sola a meta. Otra vez la carrera se convirtió en una lucha entre el ritmo de una corredora y el que puede imponer un grupo grande.
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Pero esta vez los intereses de los equipos pesaron más y las dudas de varias escuadras entre acelerar o dejar que lo hicieran otras beneficiaron a la fugada, que pudo llegar a la meta con 22 segundos de diferencia sobre dos corredoras, su compatriota Lippert (Movistar) y la suiza Marlem Reusser (Worx), mientras que el grupo de las favoritas llegó a 32 comandado por Kopecky.
En ese grupo entraron las favoritas a al general, como la neerlandesa Van Vleuten (Movistar), la sudrafricana Ashleigh Moolman (Insurance) o la italiana Elisa Longo (Lidl-Trek); también las españolas Mavi García (TeqFind) y Ane Santesteban (Jaico); pero no la neerlandesa del Worx Lorena Wiebes, que entró a 42 segundos.
Entretanto, la colombiana Paula Patiño tuvo un notable desempeño y se metió al 'Top-30' de la general.
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Tras estos resultados, Kopecky conserva el liderato una jornada más, con 49 segundos de renta sobre la sudafricana Moolman y 51 sobre Elisa Longo, Van Vleuten y la polaca Katarzyna Niewiadoma (Canyon).
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Este viernes, el Tour vivirá el preludio de las dos jornadas decisivas del fin de semana, con una etapa más corta que las anteriores, de 122 kilómetros entre Albi y Blagnac, con cuatro altos rompepiernas de cuarta categoría y llegada en llano, propicia para un esprint.