El GP de Australia fue noticia este fin de semana, por la no victoria de Max Verstappen, vigente campeón de Fórmula 1, quien ha demostrado una hegemonía absoluta sobre sus rivales. Para sorpresa de todos, se tuvo que retira por una avería en el freno de su coche, dejando así la vía libre a un Carlos Sainz que terminó triunfando en tierras oceánicas.
Verstappen no ganaba hace nueve carreras, dos del 2024 y las últimas siete del 2023. Dicho esto, la última vez que no cruzó de primero en la meta, data del 17 de septiembre en el GP de Singapur. Como hecho curioso, ese día tampoco estuvo en el podio y el ganador fue Sainz.
GP de Singapur, la última vez que Vertsappen no ganó en Fórmula 1
El comienzo del Gran Premio de Singapur transcurrió sin incidentes destacables en las estrechas pistas. Los pilotos optaron por una estrategia conservadora, centrada en preservar los neumáticos y minimizar el desgaste, manteniendo un ritmo moderado para limitar las paradas en boxes.
La carrera sufrió una leve sacudida cuando Charles Leclerc adelantó a George Russell al inicio para posicionarse segundo, alterando los planes de los líderes. Sin embargo, Lewis Hamilton, quien había superado a su compañero Russell y a Lando Norris, tuvo que ceder ambas posiciones después de salirse de pista durante la maniobra de adelantamiento.
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Tras un período de calma, el accidente de Logan Sargent de Williams provocó la entrada del coche de seguridad, ofreciendo a los equipos la oportunidad de realizar paradas en boxes, excepto los Red Bull de Max Verstappen y Sergio Pérez, que ya habían montado neumáticos duros desde el inicio.
Mientras Verstappen y Pérez optaron por mantenerse en pista, su ritmo disminuyó y perdieron posiciones gradualmente. Fernando Alonso recibió una penalización por cruzar la línea blanca en la entrada a boxes, lo que le costó cinco segundos adicionales.
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Con los neumáticos desgastados, los Red Bull experimentaron dificultades y se vieron obligados a ceder posiciones, con Verstappen, quinto y Checo octavo. Carlos Sainz demostró un dominio magistral al seguir una estrategia de conservación de neumáticos, manteniendo su liderazgo a pesar de la presión de sus rivales.
En las últimas vueltas, una batalla emocionante entre Hamilton y Russell por la victoria se materializó después de que ambos Mercedes montaran neumáticos medios nuevos. Sin embargo, Sainz mantuvo su ventaja y aseguró la victoria, poniendo fin a la racha de victorias de Red Bull.
Mientras tanto, Fernando Alonso tuvo un desempeño decepcionante debido a problemas en boxes, mientras que Pérez luchó desde una posición desfavorable para terminar noveno en una carrera difícil para Red Bull.
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