Los Jardines Vaticanos acogen desde este viernes 9 de julio una réplica hecha con mosaicos de la Virgen de Chiquinquirá, la patrona de Colombia, un regalo del Gobierno al Estado de la Ciudad del Vaticano.
"Su presencia en el Vaticano, en el corazón de la catolicidad, es decir que allí está la Iglesia colombiana presente, que allí también está la oración y el fervor de tantos creyentes de este país, que nos presentamos ante el mundo como amantes de María, como devotos que compartimos una comunión espiritual", explicó fray Franklin Buitrago Rojas, de la comunidad de los frailes dominicos y decano de Teología de la Universidad Santo Tomás, en Noticias Caracol.
Cuadro de la Virgen de Chiquinquirá
El mosaico, encargado por la orden dominica y construido con 70.000 diminutas piezas de colores azules, rojizos y dorados, se descubrió este viernes con la presencia del embajador de Colombia ante la Santa Sede, Jorge Mario Eastman.
Publicidad
“Encargaron a un maestro de Verona, en el norte de Italia, la elaboración de esta bella imagen. Es una reinterpretación evidenciando los colores de nuestra bandera en el manto de María, pero también con la Orquídea, nuestra flor nacional, que aparece como una ofrenda a los pies de la imagen”, comentó fray Franklin.
#LoÚltimo | Esta es la imagen de la Virgen de Chiquinquirá que fue entronizada en los jardines del Vaticano.
— Noticias Caracol (@NoticiasCaracol) July 9, 2021
Siga la transmisión en vivo > > https://t.co/rlSMtLNp28 pic.twitter.com/GstboCHAuA
En un primer momento estaba previsto que el papa Francisco asistiera al acto, invitado por Eastman, pero a última hora se le notificó que el pontífice no acudiría. La hospitalización del líder religioso para ser sometido a una operación de colon, de la que se recupera satisfactoriamente en el Policlínico Gemelli de Roma, aclaró la causa de su ausencia.
Publicidad
La Virgen de Chiquinquirá, que también es venerada en Venezuela, Perú, Ecuador y Bolivia, podrá ser contemplada en los Jardines Vaticanos en un momento de especial dificultad para Colombia, pero también para el mundo entero por la emergencia sanitaria desatada por la pandemia del COVID´-19, según explicó Eastman en un encuentro con la prensa en Roma.
La imagen original de la virgen, del siglo XVI, fue abandonada durante años tras perder su color, hasta que una devota la recuperó y volvió a colocarla en una capilla, donde, según la tradición, de produjo una restauración milagrosa de la obra.
De acuerdo con el embajador, se trata de "un ejemplo de la cultura del descarte" en "un momento en que el papa está llamando nuestra atención contra la cultura del descarte, que descarta a las personas a favor del individualismo y una economía de consumismo desenfrenado".
En 2017, durante la visita del papa Francisco a Colombia, su imagen fue trasladada desde el santuario de Chiquinquirá a Bogotá a petición suya. El argentino fue el segundo pontífice en venerarla, tras Juan Pablo II en 1986.
Publicidad
“La imagen de la Virgen de Chiquinquirá logra reunir en torno a sí el cariño, la devoción, los mejores deseos y sentimientos de muchísimos colombianos, de muchas regiones, de muchos grupos, por eso esta invitación a la reconciliación, a volver a tejer los lazos de nuestra comunión”, puntualizó fray Franklin.