Se trata del señalado narcotraficante Said Razzouki, por quien las autoridades de su país ofrecían una millonaria recompensa.
La captura fue confirmada este sábado por la Fiscalía de los Países Bajos, en un operativo en el que participaron unidades antidroga de la DEA y el FBI. Autoridades colombianas buscan establecer si tenía nexos con el Clan del Golfo.
El arresto se produjo este viernes en un edificio de apartamentos en el municipio de Sabaneta, sur del Valle de Aburrá, aunque el detenido trató de huir y resultó herido al lanzarse de un tercer piso.
La Policía holandesa, que explicó en un comunicado que centenares de investigadores y especialistas habían dedicado "día y noche" a la búsqueda del temido criminal durante los últimos años, ya ha pedido su extradición, aunque espera que el proceso lleve algún tiempo.
Además de las autoridades colombianas, el equipo de investigación también estaba formado por la Fiscalía y la Policía holandesas, la Administración de Control de Drogas de EE. UU. (DEA) y la Oficina Federal de Investigación (FBI), aunque todavía se desconoce cómo lograron dar con su paradero.
Said R., de 47 años, era mano derecha de otro presunto narcotraficante y líder de la mafia holandesa, Ridouan Taghi, extraditado a los Países Bajos el pasado diciembre después de haber sido detenido en Dubái, donde había estado escondido en una zona de chalets, pagando en efectivo el alquiler y sin salir de la casa para pasar desapercibido.
Ambos, que habían estado en listas de búsqueda y captura internacionales, están acusados de ordenar varios asesinatos durante los últimos años y, según la Justicia, Said R. es el principal sospechoso en el conocido como juicio de Marengo, que comenzará el próximo marzo y que le procesará por gestionar cinco asesinatos y varios intentos de homicidio.
En este proceso judicial, Said R. está formalmente acusado de liderar una organización criminal que tiene el objetivo de llevar a cabo asesinatos en el inframundo, como la de un conocido reportero especializado en temas del crimen organizado, Martin Kok, en 2016, a quien se intentó matar antes con una bomba colocada debajo de su carro, cerca de Ámsterdam.
Un total de 17 personas se encuentran ahora detenidas por el proceso judicial, que también se ha cobrado la vida de varias personas. El hermano y el abogado del testigo protegido más importante del caso, Nabil B., han sido asesinados a tiros en Ámsterdam, en un intento de silenciarlos para que no testifiquen, reseñó la agencia EFE.
Por Said R., quien ya fue trasladado a Bogotá, se ofrecía una recompensa de 100 mil euros.
Gisteren is Saïd R. in de Colombiaanse stad Medellin aangehouden. Dat kan de politie nu, na een succesvolle identificatie, bevestigen. https://t.co/vofmNHZbIN #marengo https://t.co/YvjrAXXBzj
— Landelijke Eenheid (@POL_Lnd_Eenheid) February 8, 2020