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La tragedia del ciudadano colombiano René Martínez Gutiérrez comenzó en marzo de 2011, cuando cayó por primera vez en la cárcel.
“A mi hermano lo capturaron con una orden de extradición directamente y solicitada por Perú, denunciándolo que era un narcotraficante que tenía problemas pendientes allá en Perú”, aseguró la hermana de René.
La justicia colombiana lo detuvo dos veces para que respondiera por un delito que, según sus familiares, no cometió y por el que lo condenaban a 26 años de prisión.
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“Vuelven y caen en el mismo problema, ya esta es la tercera vez… toman a las personas, las privan de su libertad, pero no consultan qué ha sucedido en el pasado”, anotó la mujer.
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En su segunda entrada a prisión, René Martínez Gutiérrez estuvo casi un mes junto a los más temibles delincuentes, en el patio de los extraditables de la cárcel La Picota.
Luego, Perú emitió un documento en el que señaló que no era la persona que estaba buscando por narcotráfico a través de circular roja de Interpol y la fiscal de Colombia ordenó su libertad.
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René Martínez Gutiérrez continuó su vida y migró a Estados Unidos, pero una enfermedad de su padre lo obligó a viajar a Colombia a inicio de 2023 y la tragedia revivió.
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“No le dieron la oportunidad el sábado que llegó en la madrugada de arribar a Colombia, en el avión le pidieron la cédula… entró la Interpol y detuvo a mi hermano”, afirmó la mujer.
René Martínez Gutiérrez fue llevado a la estación de Policía Los Mártires, donde se enteró de que su padre falleció. La Fiscalía informó que espera que se formalice la solicitud de extradición por parte del Gobierno de Perú, el cual se encargará de establecer si esta persona es la que siguen buscando.
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