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Desde la cárcel, ‘Tommy masacre’ mandaba a asesinar a conductores que no pagaban extorsiones

El descarado delincuente les dijo a las autoridades que no le importa seguir dando órdenes de ejecución a sus sicarios, porque según él, estará encerrado por lo que le resta de vida.

A la cárcel de La Picota, en Bogotá, tuvo que ser trasladado alias ‘Tommy masacre’, quien pese a purgar una condena, con su red de extorsión tenía arrinconados a los transportadores y a comerciantes en el Caribe colombiano.

Este delincuente, que estará encerrado durante 38 años, les dijo a las autoridades que no le importa seguir dando órdenes de ejecución a sus sicarios, porque según él, estará preso por lo que le resta de vida.

Según las autoridades, el despiadado criminal conocido como ‘Tommy masacre’ está detrás del ataque sicarial que dejó gravemente herido al conductor de un bus en Barranquilla.

La nueva víctima hace parte de la decena de conductores de servicio público atacados en los últimos días por los sicarios de ‘Tommy masacre’.

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Las misiones delincuenciales, según los investigadores, las entrega el señalado asesino a sus hombres, a través de teléfonos celulares. Se trata de comandos armados de sicarios extranjeros ya identificados por la Policía, que incluso hacen parte de un cartel de los más buscados en Santa Marta y Barranquilla y que ‘Tommy masacre’ dirigía desde su celda en la cárcel de máxima seguridad de Picaleña, donde estaba recluido, desde hace un par de meses, por una condena de casi 38 años por homicidio y extorsión.

Sus comandos criminales tienen hoy en pánico a los humildes conductores que trabajan en empresas de transporte público en la capital del Atlántico, que se negaron a pagarle una extorsión a ‘Masacre’, lo que los convirtió en su objetivo militar.

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Desde la cárcel de Picaleña están ordenando hacer acciones contra algunas empresas de transporte. Ya llevamos más de 6 operaciones en el Atlántico con más de 200 capturados por extorsión, donde están cobrando dinero a las empresas de buses, a los comerciantes y al sector de abarrotes”, indicó el coronel Gustavo Adolfo Camargo, subdirector del Gaula de la Policía.

La información obtenida por el Gaula, gracias a las ayudas tecnológicas, permite en muchos casos frustrar ataques de los homicidas desde la cárcel en Santa Marta y Barranquilla.

Una serie de interceptaciones telefónicas, conocidas por Noticias Caracol, muestran la forma de actuar del criminal.

En una de ellas, ‘Tommy masacre’ recibe una queja porque uno de sus sicarios no aparece para entregarle un arma de fuego con la que van a cometer un asesinato.

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‘Tommy masacre’ es un venezolano que llego hace cerca de dos años a Colombia. Según las investigaciones, desde esa época se apoderó de una banda conocida como Los Costeños, usada para librar una guerra contra el Clan del Golfo y, de paso, mostrar poder en la Costa Atlántica.

El grupo delincuencial le ha servido, además, para cometer una docena de asesinatos que dirige desde la cárcel de alta seguridad de Picaleña, un centro penitenciario que habría convertido en su centro de operaciones.

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Por su actividad criminal, un grupo especial del Inpec y del Gaula de la Policía lo sacó de Picaleña y lo trasladó a la cárcel La Picota, en Bogotá. En su nuevo centro de reclusión lo mantienen aislado e incomunicado por 14 días en una celda especial para presos altamente peligrosos.

A él y a su eterno cómplice los mantienen vigilados las 24 horas con cámaras de seguridad.

“Fueron extraídos de la cárcel de Picaleña dos individuos Juan Manuel Borré Barrreto y Tommy Cerpa Brito, este último de nacionalidad venezolana, los cuales, a través de las diferentes investigaciones, se logró determinar por parte de la Fiscalía que aun estando privados de la libertad seguías delinquiendo, esto generó que realizáramos un traslado permanente y los trasladáramos al pabellón de alta seguridad de La Picota”, detalló el general Mariano Botero, director del Inpec.

Ahora lo que se preguntan las víctimas es ¿desde esa cárcel dejara de delinquir y asesinar?

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“Las garantías son claras, con la evaluación que se ha hecho estas personas seguirán bajo custodia especial en los pabellones, el exterior y el uso de teléfonos, el cual tiene por Constitución el derecho a hacer su llamada, serán vigilados y con base en eso actuaremos para evitar que estos individuos sigan delinquiendo al interior de los establecimientos”, agregó Botero.

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