El bajo nivel del embalse El Quimbo, en el sector del viaducto el Balseadero, en el centro del departamento del Huila, ha encendido las alertas. Los pescadores y el gremio del turismo son los más afectados.
La imagen en esta zona del país es apocalíptica: el embalse quedó reducido a lodo y un afluente mínimo, para donde se mire no hay casi agua. El bajo nivel del líquido ha generado afectaciones notables para los pescadores de la zona y el gremio del turismo.
“No da para navegar. Las canoas se pegan, el pescador tiene que tirarse esas aguas a empujar la canoa”, señaló el pescador Carlos Bocanegra.
Por otro lado, Jhony García precisó que anteriormente la pesca era muy buena, pero actualmente para sostener un hogar, un arriendo y la comida, "eso no nos está dando”.
El sector turismo en esta zona está en jaque. Lina Salazar, propietaria de un sitio turístico, recalcó que “antes un fin de semana siempre viajan 300 o 400 personas, pero este fin de semana yo creo que ni el 20% bajó. La gente viene acá y lo único que ve es sequía. Es imposible trabajar con las motos o con las lanchas porque no hay como navegar”.
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Desde la Oficina de Gestión de Riesgo señalaron que no hay alerta en la generación de energía.
“En este momento la alerta es blanca, porque la producción de energía se está llevando a cabo normalmente, garantizando así que los colombianos tengamos la energía para distintas actividades”, indicó Édgar Martín Lara, secretario de Gobierno del Huila.
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