El abogado de la Arquidiócesis de Cali, Wálther Collazos, ratificó este lunes 13 de febrero que los padres son responsables por los abusos sexuales que el sacerdote Wílliam de Jesús Mazo Pérez cometió a varios niños en el 2009.
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“Se cita el artículo del Código Civil donde deja imperiosamente determinado que la responsabilidad de los padres no es sólo en lo bueno, sino también en lo malo. El padre de familia debe ser guía, modelo a seguir, núcleo de la familia, eje central”, manifestó el abogado de la Arquidiócesis de Cali.
La madre de dos de los menores víctimas rechazó el señalamiento. “Nosotros los padres no somos culpables de haber dejado a nuestros hijos, ellos estaban en la preparación de primeras comuniones y de una banda marcial que supuestamente había allí”, dijo la mamá de uno de los niños abusados por el sacerdote.
El abogado que representa a la iglesia en el proceso de reparación insiste en que la Arquidiócesis no es responsable por las actuaciones personales de los sacerdotes.
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“La Arquidiócesis no ha sido declarada responsable en ninguna forma, esa es la defensa, estamos sobre hechos propios del señor Wílliam de Jesús Mazo, en horarios que no eran institucionales, ni de ninguna clase de prestación de servicio”, confirmó Collazos, el abogado de la Iglesia católica en la capital del Valle del Cauca.
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Por su parte, las familias de los niños explicaron la razón que llevó a que los niños permanecieran en horas de la noche, en la parroquia, con el sacerdote Mazo Pérez.
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“El sacerdote los retenía, diciendo que le ayudaran, porque él estaba enfermo, que era diabético, que podría sufrir un desmayo”, continuó la madre de los niños abusados por el clérigo.
El abogado de las víctimas, Élmer José Montaña Gallego, informó que la posición de la iglesia causó enorme dolor e impotencia a sus representados, por lo que exigen que el papa Francisco conozca el caso. La petición fue hecha a monseñor Ettore Balestrero, representante del sumo pontífice en Colombia.
“Debido a la inamovible y tozuda posición de la Arquidiócesis de Cali, mis representados me encargaron la tarea de acudir a usted para solicitarle, respetuosamente, ponga en conocimiento del papa Francisco el documentado de la iglesia de Cali y le exprese que las víctimas de pederastia consideran un insulto y una humillación que se les endilgue responsabilidad por las atrocidades cometidas por el sacerdote Wílliam de Jesús Mazo Pérez”, indicó la carta enviada a monseñor Balestrero.
Las familias también señalaron que la iglesia nunca les ha ofrecido reparación. Dicen que les ofreció acompañamiento en psicología y educación para los niños en su momento, pero siempre y cuando retiraran el proceso en su contra por la restauración que reclaman.
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Mientras la posible responsabilidad de la Arquidiócesis sea definida por un juez dentro del proceso, el próximo 1 de marzo, fecha en la que inicia la Cuaresma, las víctimas del sacerdote realizarán una protesta pacífica frente a la Catedral de San Pedro y luego harán lo mismo en la sede de la Conferencia Episcopal, lugares ubicados en la capital del Valle del Cauca.