En un consejo extraordinario de seguridad, las autoridades ofrecieron hasta 30 millones de pesos para quien brinde información que permita la captura de los responsables del secuestro en Chocó del delegado de la Registraduría, Jefferson Elías Murillo,
y del funcionario del Sena, Bliderson Arboleda Montañez.
Los funcionarios fueron secuestrados el sábado 6 de enero en la tarde por hombres armados en la carretera entre Quibdó, la capital regional, y el municipio de Istmina, informaron las autoridades.
"Rechazo el secuestro de nuestro delegado departamental del Chocó, Jefferson Elías Murillo. Desde el primer momento hemos estado en contacto con las autoridades y con su familia. Exigimos la liberación inmediata de nuestro funcionario y su regreso sano y salvo", expresó el registrador nacional, Hernán Penagos.
Según la información preliminar, un grupo de hombres armados interceptó el automóvil en el que se desplazaban los funcionarios, los forzó a salir del vehículo y los condujo por una zona boscosa del Chocó.
Por el momento se desconoce quién los plagió, pero en el Chocó, un departamento en su mayor parte selvático y con costas sobre el océano Pacífico y el Atlántico, operan la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), disidencias de las FARC y el Clan del Golfo.
No obstante, el coronel Mauricio Rico Guzmán, comandante de la Policía en el Chocó, señaló que hay “una injerencia del ELN y tenemos también la participación de unas organizaciones delictivas en la zona. Se han presentado hechos anteriores, posibles constreñimientos a los conductores de manera esporádica a quien pasa por este sector de la vía”.
Y es que en esa zona, según las autoridades, son frecuentes los secuestros y los hurtos a conductores.
El secuestro ha sido objeto de debate público en Colombia por la negociación de paz del Gobierno con el ELN, que se niega a abandonar ese delito con fines económicos, alegando que lo hace como fuente de financiación de sus filas.
La polémica creció tras el secuestro en octubre pasado de Luis Manuel Díaz, padre del futbolista Luis Díaz, delantero del Liverpool, que fue cometido por el ELN, guerrilla que lo mantuvo en cautiverio durante doce días y luego lo entregó a una comisión humanitaria.
Este domingo 7 de enero, el papa Francisco pidió por “la liberación sin condiciones de todas las personas actualmente secuestradas en Colombia”.
"Este gesto, que es un deber delante de Dios, favorecerá también un clima de reconciliación y de paz en el país", añadió, ante los miles de fieles reunidos para escucharle frente a la venta del palacio apostólico, al término del rezo dominical del Ángelus en la plaza de San Pedro del Vaticano.
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