Luis Alberto Monsalvo Gnecco, actual gobernador del departamento del Cesar, tendrá que enfrentar una condena por hechos de corrupción electoral. Así lo decidió la Corte Suprema de Justicia , que lo halló responsable de presión indebida a un grupo de electores.
Según la Sala Primera de la Corte Suprema de Justicia, Monsalvo Gnecco fue hallado culpable de realizar una promesa ilegal a una comunidad a cambio de que esta votara por él.
Conforme a lo revelado por el alto tribunal, esto sucedió en la campaña del 2011, cuando Monsalvo Gnecco ofreció no desalojar a un grupo de familias desplazadas que estaban ubicadas en una invasión denominada Tierra Prometida si lo apoyaban en las urnas.
“El acusado desnaturalizó la libertad del voto a toda una población, afectando la autonomía de los electores a través de esa promesa. Su propósito era obtener un beneficio propio”, aseguró Ariel Torres, magistrado ponente.
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La promesa ilegal también dio argumentos al alto tribunal para decir que existe certeza de que Luis Alberto Monsalvo Gnecco llegó a la Gobernación del Cesar en la campaña del 2011 presionando a sus electores.
Gabriel Jaimes, fiscal delegado para el caso de Monsalvo Gnecco, hizo énfasis en que el hoy juzgado “se aprovechó de las comunidades vulnerables y pactó permitir una condición contraria a la ley para asegurar votos”.
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Mediante un comunicado, Luis Alberto Monsalvo Gnecco dijo que apelará la decisión de la corte en segunda instancia. Entretanto, el alto tribunal notificará al gobernador el monto de la pena.