La Fiscalía General de la Nación imputó a un coronel, un teniente y un patrullero por la muerte de seis civiles durante las protestas de Cali, entre el 28 de abril y el 3 de mayo. Las víctimas eran: Einer Alexander Lasso, Kevin Antonhy Agudelo, José Emilson Ambuila, Harold Antonio Rodríguez, Edwin Villa Escobar y Miguel Ángel Pinto.
Las familias de dos de los seis ciudadanos muertos hablaron tras conocer la decisión del ente judicial.
Uno de los imputados fue el patrullero Wilson Esparragoza, quien, según la Fiscalía, habría disparado mortalmente contra Einer Alexander Lasso durante las protestas de Cali del 28 de abril en Puerto Rellena.
Ariana Rocío Campo, esposa de la víctima, dijo que reclamaba “justicia porque la muerte de mi marido no va a quedar así, porque mi marido no era un desechable, ni un gamín, ni una rata, nada de eso”.
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Otro de los imputados es el teniente Néstor Mancilla, comandante del grupo GOES, quien estaba al mando de los policías señalados de disparar contra los manifestantes de las protestas de Cali el 30 de abril, en el barrio El Diamante, donde murieron dos personas, y en el barrio Siloé, la noche del 3 de mayo, donde hubo tres fallecidos.
Entre las víctimas se encontraba Kevin Antonhy Agudelo, un joven de 21 años que asistía a una velatón.
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Su mamá, Ángela Jiménez, manifestó que inicialmente había sentido “mucho descontento porque nosotros como seres humanos no tenemos el poder de detener tanta injusticia, entonces el juez tomó en cuenta eso porque ellos querían que el caso de lo sucedido el 3 de mayo y los días anteriores que empezó la protesta se dejara en manos de la justicia militar, pero el juez les dijo que ese no era el contexto”.
El tercer imputado es el coronel Édgar Vega, comandante operativo de la Policía Metropolitana, quien, según la Fiscalía, no fue garante ni hizo algo para evitar la muerte de los seis civiles en las protestas de Cali.
Hollman Ibáñez, abogado del oficial, cuestionó la forma como se endilgaron los cargos a su cliente.
“En una audiencia atípica, por llamarlo de alguna manera, exótica, la Fiscalía General de la Nación imputó de manera muy vaga los cargos al coronel Vega Gómez sin elementos materiales probatorios suficientes, sin siquiera tangencialmente demostrar la responsabilidad del coronel Vega”, sostuvo.
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La Fiscalía aún no ha solicitado medida de aseguramiento contra los policías imputados por las muertes ocurridas en las protestas de Cali.
Los uniformados se declararon inocentes.
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