A un señalado ladrón en Bogotá le quemaron la moto en el barrio Policarpa, centro de la ciudad, por presuntamente haber cometido varios robos en ese sector durante el lunes 17 de abril.
El hombre no actuó solo y cometió los atracos junto a otro sujeto, según testigos.
Los dos presuntos delincuentes fueron señalados de robar varios celulares y aunque uno escapó, el otro fue retenido por la comunidad.
Al supuesto ladrón en Bogotá no solo lo golpearon, al punto de terminar internado en un centro clínico, sino que cogieron la moto en la que se movilizaba y la quemaron, quedando reducida a cenizas.
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Justicia por mano propia
Los casos de justicia por mano propia se están volviendo más frecuentes, no solo en la capital de Colombia sino en otras ciudades.
Uno de los hechos más recientes fue reportado en el barrio Santa Rosita de la localidad de Engativá, donde están cansados de los delincuentes.
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La emprendieron contra un hombre que aparentemente estaba asaltando a quienes llegaban a sus viviendas en horas de la noche. Allí, la Policía Metropolitana tuvo que rescatarlo de los golpes que le propinaron algunos ciudadanos indignados.
Aunque en estos dos casos los señalados delincuentes lograron sobrevivir, no pasó así con otro sujeto en marzo pasado. Al presunto ladrón en Bogotá lo mataron mientras que su compañero fue capturado.
El hecho ocurrió en la calle primera con carrera 19, en el barrio Eduardo Santos.
La información preliminar apuntaba a que dos hombres en moto robaron a una mujer cuando ingresaba a su conjunto residencial en la zona. Al parecer, varias personas los persiguieron cuando intentaban huir por la avenida principal hacia el norte de Bogotá y alguien les disparó.
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Cuando los policías llegaron al lugar encontraron a uno de los presuntos delincuentes herido. Aunque lo trasladaron a una clínica cercana perdió la vida.
Las personas ponen en riesgo su vida enfrentándose a los ladrones, como ocurrió con el comerciante de una farmacia que se enfrentó a un delincuente que quiso robar en su local, ubicado en Marinilla, Antioquia.
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La víctima sabía que estaba en desventaja cuando se lanzó a pelear con el hampón armado, que cubría su rostro con un casco de motocicleta.
Una persona llegó a la farmacia y le ayudó al comerciante a sacar a golpes y empujones al ladrón y cuando regresó a su establecimiento, en la puerta apareció otro delincuente que le disparó por la espalda. Milagrosamente salió ileso.