La Escuela Simón Bolívar de la Policía Nacional en Tuluá, Valle de Cauca, fue escenario de un vergonzoso hecho en el que los estudiantes, durante una jornada pedagógica, usaron símbolos nazis e incluso algunos se disfrazaron con prendas alusivas al régimen de Adolf Hitler y hasta se vistieron como él. El incidente generó rechazo nacional e internacional.
La embajada de Estados Unidos, así como las de Alemania e Israel, dijeron que lo sucedido era “indignante” y “decepcionante”.
“Estoy consternado y profundamente decepcionado por el uso de símbolos y uniformes nazis en las instalaciones de entrenamiento de la Policía de Colombia. Ninguna explicación es suficiente”, manifestó el embajador de EE. UU., Philip S. Goldberg.
“Eventos como este son indignantes y ofenden de manera directa no solo a los judíos, sino también a todas las víctimas del régimen nazi y sus criminales. Cualquier discurso de odio puede llevar a resultados trágicos como los vividos años atrás, durante la Segunda Guerra Mundial, donde 6 millones de judíos fueron asesinados en el crimen más horrendo jamás cometido en la historia de la humanidad”, expresaron las diplomacias de Israel y Alemania en un comunicado conjunto.
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Por eso la directora de escuelas de la Policía, la general Yackeline Navarro, viajó a Tuluá para emprender acciones por el uso de las prendas nazis. Una de ellas fue apartar del cargo al director de la institución educativa.
Asimismo, dijo, “vendrán las investigaciones, porque no voy sola a tomar las decisiones. Una cosa es la parte educativa y otra cosa las decisiones disciplinarias que se deban tomar en torno a esto y por eso me acompaña la Inspección General”.
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Sobre el evento manifestó que “desafortunadamente es un error de decisiones, de supervisión por parte de la escuela y en este momento del director por no haber verificado”.
La general Navarro reconoció que estaba enterada de la semana de la internacionalización, “pero del contexto que se llevaba a cabo no se sabía”.
Además, anunció que reforzarán algunas cátedras en las escuelas buscando darles mayor conocimiento histórico y cultural a quienes buscan ingresar a la institución.
Sin embargo, recordó “que los hombres y mujeres que ingresan a la Policía Nacional ya traen todo su desarrollo tanto de primaria como de bachillerato donde hay unos contextos de la parte universal de la historia”.
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Para Robert Posada, exinstructor de la Escuela de Policía Simón Bolívar, sería “muy desproporcionado condenar a estos jóvenes, que en su mayoría son personas de estratos medios bajos -3, 2, 1-, y de poblaciones muy apartadas de esta región: Cauca, Nariño, Valle del Cauca, Risaralda y Chocó, donde la educación tiene grandes deficiencias”.
Mientras que Pedro Antonio Ordóñez, personero de Tuluá, considera que “hay que entender la postura de las embajadas y es que se sintieron heridas, pero no pueden darle una lectura incorrecta a la pedagogía”.
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Luis Mario Larenas, párroco de la iglesia San Bartolomé de Tuluá, consideró que lo que se ha divulgado en redes sociales sobre los símbolos nazis usados en la escuela “pues a todos los ciudadanos, particularmente los tulueños, pues nos ha movido en el sentido de que es una institución que forma en valores, en principios, en respeto a los futuros agentes de Policía”.