Estuvo 24 horas inmovilizado, en el municipio de Tuchín, Córdoba. Autoridades indígenas dicen que el sujeto no tenía permiso para usar ese dispositivo.
Dairo Blanco Suárez, cacique territorial de Tuchín, afirma que este tipo de espectáculos genera un impacto negativo dentro de sus jóvenes, porque quienes van a su territorio con picós, llegan con “sustancias alucinógenas que han afectado nuestra población”.
Según las autoridades indígenas, las fiestas organizadas con estos dispositivos han perturbado la tranquilidad de cerca de 38 mil habitantes del municipio.
Asimismo, aseguran que se han perdido las raíces y costumbres ancestrales.
“Diez, veinte años atrás, nuestros ancestros nos acostumbraron a que el baile tradicional era la música típica de pito atravesao y las radiolas”, dijo Sofanor Quintero, indígena de la etnia Zenú.
Los bailes amenizados con picós quedaron restringidos en esta zona aborigen.
Le puede interesar:
Por oponerse a ritual, indígenas habrían cogido a fuetazos a...
Updated: abril 05, 2018 04:39 p. m.