Cuatro policías de la Dijín y un civil que habrían participado en las supuestas chuzadas a Marelbys Meza,
exniñera de Laura Sarabia, fueron capturados en las últimas horas. También hay orden de detención contra otras cinco personas.
Las detenciones se realizan en dos líneas de investigación: una por las presuntas chuzadas, y otra por falso testimonio, en la que se ordenó la captura de un policía y un civil.
El procedimiento "corresponde al cumplimiento de órdenes de captura emitidas por un juez de control de garantías solicitadas por el fiscal titular del caso, quien bajo su autonomía e independencia hizo la petición al juez y este las expidió", informó la Fiscalía General de la Nación en un comunicado.
La Fiscalía General de la Nación adelanta una investigación por estas presuntas interceptaciones ilegales no solo a la exniñera de Sarabia, Marelbys Meza, también a una extrabajadora de servicios domésticos de la exjefe de gabinete de la Presidencia tras la pérdida de una millonaria suma de dinero de la casa de la exfuncionaria.
"Los elementos de prueba dan cuenta de que las personas capturadas estarían involucradas en las acciones ilícitas realizadas", indicó el ente investigador.
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El abogado Miguel Ángel del Río, quien también está vinculado al proceso luego de la muerte del teniente coronel Óscar Dávila Torres,
que le había solicitado al letrado que lo representara, se pronunció en sus redes sociales al enterarse de las capturas.
“Regresa el nuevo show de la Fiscalía para atacar al gobierno. Con ocasión al nuevo nombramiento de Laura Sarabia la respuesta de la fiscalía es capturar a miembros de la Dijín en este mismo momento. Vamos a enfrentar esta persecución”, expresó en su cuenta de X.
Marelbys Meza, según la investigación, no solo habría sido interceptada ilegalmente, también fue sometida a prueba de polígrafo.
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En interrogatorio con la Fiscalía General de la Nación, el capitán Elkin Gómez, jefe de la oficina del polígrafo, y el intendente Jhon Sacristán, poligrafista, ambos encargados de ese departamento, habrían declarado que se cumplieron todos los protocolos establecidos en dicho despacho y nunca hubo nada violatorio de la ley.
Cuando se les preguntó por las personas que estarían a cargo del área, señalaron que la dependencia cumplía órdenes de la oficina anticipativa de la Presidencia, es decir, la que estaba bajo la sombrilla del coronel Óscar Dávila.