Por Javier Ordóñez, muchos recuerdan a Dilan Cruz, al grafitero Diego Becerra y a Anderson Arboleda

La brutalidad policial de la que fue víctima el abogado Javier Ordóñez trae a la mente otras dolorosas escenas en las que se señala a uniformados. Las familias de Anderson Arboleda, Dilan Cruz y Diego Felipe Becerra aún claman justicia.

Javier Ordóñez

El miércoles 9 de septiembre el país despertó con la noticia del fallecimiento de Javier Ordóñez, un abogado de 46 años, tras un violento procedimiento ejercido por la Policía. Imágenes que tomó un amigo dan cuenta de cómo usaban armas tipo taser, a pesar de que ya estaba reducido y suplicaba clemencia.

“Lo mató la Policía… se lo llevaron a un CAI a terminarlo de matar”, expresó Elvia Bermúdez, familiar del hombre muerto, que dejó dos hijos menores de edad.

En contexto:

Anderson Arboleda

El 20 de mayo de 2020 el joven de 21 años Anderson Andrés Arboleda Montaño recibió, dicen sus familiares, una agresión con gas pimienta y con bolillo por parte de un policía en Puerto Tejada, Cauca.

Aunque le hicieron curaciones caseras, la salud del joven empeoró con el paso de las horas y al día siguiente fue llevado a la clínica Valle de Lili, en Cali, donde perdió la vida a causa de un bolillazo en la cabeza, señaló su familia.

Vea también:

Dilan Cruz

La última semana de noviembre de 2019 estuvo marcada por protestas en medio del paro nacional en las que se exigía justicia por los líderes sociales e inconformismos con el Gobierno Duque. Sin embargo, un hecho partió en dos el curso de estas movilizaciones.

El 23 de noviembre el joven Dilan Cruz marchaba en el centro de Bogotá cuando recibió un impacto en la cabeza con un arma tipo bean bag, la cual fue disparada por un agente del Esmad. Dos días después, el 25 de noviembre, el joven estudiante no logró sobreponerse y falleció .

Aunque el caso se investigaba a través de la Fiscalía General de la Nación, a finales de agosto se conoció que será la justicia penal militar la que lo llevará.

Puede ver:

Diego Felipe Becerra

Este joven grafitero, de 16 años, falleció en 2011 por el disparo que le dio por la espalda el patrullero Wilmer Antonio Alarcón, destituido posteriormente y condenado en ausencia a 37 años de cárcel.

Pero no fue el único uniformado involucrado, diez policías terminaron vinculados a la investigación por alteración de la escena del crimen para encubrir a su compañero.

Otros dos patrulleros también fueron condenados, Freddy Navarrete y Nelson Rodríguez, al igual que el subintendente Giovanny Tovar, señalado de haber puesto un arma en el cuerpo de Diego Felipe Becerra.

En 2018 la Procuraduría destituyó e inhabilitó al coronel Jesús Arévalo Rodríguez y al teniente Rosenberg Madrid Orozco por haber obstaculizado las investigaciones.

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