Este es el primer caso en Colombia en el que la tenencia de una mascota es definida por una autoridad civil tras la separación de sus amos.
La historia comenzó en 2018 cuando una pareja decidió que su futuro no sería más juntos. El problema fue cuando tuvieron que definir quién se quedaría con la mascota que habían decidido adoptar.
“Se presenta al despacho de la Comisaría una señora, argumentando que quiere regular custodia, cuidado personal, alimentos y visitas de su mascota. Dice que con su expareja adoptaron un perro en 2013. Ellos dos se separaron en 2018 y venían funcionando con visitas y acuerdos de gastos de la mascota hechos entre ellos, pero el problema nació con que uno de los dos decide salir de la ciudad y radicarse en otro municipio. Ahí comienza el conflicto”, le dijo a Blu Radio el comisario de familia de Belén, comuna 16 de Medellín, Carlos Alberto Velásquez Escobar.
El caso se resolvió este miércoles cuando el comisario ordenó que el cuidado del animal, un cruce de criollo con labrador, sea compartido. “Ella lo va a tener 14 días y él 7 días. Él asume gastos veterinarios y ella guardería y alimentación. Además, él tiene derecho a 30 días de vacaciones calendario en el año para compartir con el animal”, la explicó Velásquez a Blu Radio.
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El caso ha despertado interrogantes sobre la condición del animal como parte de una familia.
Según Blu Radio, “en la audiencia de conciliación amparada en la Ley 640 de 2001, poco se escuchó la palabra perro o mascota. Para términos legales, el comisario y las partes hablaron de un animal de compañía”.
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