El tramo de 1,5 kilómetros tiene doble propósito: agilizar el paso vehicular y proteger la franja de tierra y manglar que separa al mar de una ciénaga próxima.
El pedraplén, que se abrirá oficialmente en diciembre, fue habilitado para el paso de vehículos.
Gracias a esta obra, el tiempo de desplazamiento desde y hacia Cartagena se disminuyó en por lo menos 40 minutos.