Paro armado del ELN mantiene en vilo a miles de personas en varios municipios del Chocó

Cerca de 50.000 personas están confinadas en el Bajo San Juan, Chocó , por el paro armado anunciado por el ELN y que tienen atemorizada a la población. Seguridad, economía y cierre de pasos que permiten la movilidad, algunos de los problemas que mantienen en jaque al departamento.

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Tras casi 36 horas de paro armado crece el ambiente de zozobra en el Chocó, donde sus pobladores temen que, de no cumplir con las demandas del ELN, este grupo al margen de la ley pueda tomar retaliaciones en contra de al menos 5 municipios.

Ayudas humanitarias no han podido ingresar a la zona

Con el paso de las horas se ha ido complicando la situación para cientos de familias de la zona rural de Sipí, Istmina y Medio San Juan, quienes estaban expectantes a unas ayudas humanitarias que no han podido llegar a la zona.

Las embarcaciones permanecen ancladas a las orillas, sin embargo, desde la Iglesia católica y diferentes organizaciones intentan mediar mecanismos para que al menos estas ayudas lleguen a los más necesitados.

Los motivos ocultos detrás del paro armado del ELN

De acuerdo con las autoridades, miembros del ELN y el Clan del Golfo se estarían disputando el control del sur del Chocó, puesto que sus ríos son corredores estratégicos para el transporte de narcóticos hacia el Pacífico.

El coronel Christian Leguizamón Zárate, comandante (e) de la Fuerza de Tarea Conjunta Titán, añadió que, además, en estos corredores hídricos hay explotación de minería ilegal y los grupos al margen de la ley aprovechan para extorsionar a quienes practican estas actividades.

Las poblaciones ribereñas son las que más sienten las consecuencias del paro armado, por ello, las autoridades pusieron a disposición de la comunidad más de 5.000 hombres que por aire, tierra y agua se unieron a la lucha contra la delincuencia.

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