A cinco norteamericanos les exigieron cerca de 600 mil pesos por ocho piñas coladas, dos mojitos, una cerveza, una gaseosa y el uso de la sombrilla.
El hecho ocurrió en el balneario de Bocagrande y los afectados visitaban a unos familiares que residen en Cartagena.
“Les estaban cobrando 550 mil pesos, más el servicio alrededor de 600 mil pesos por diez cocteles y el uso de la sombrilla y logramos bajar la tarifa a 320 mil pesos, que, insisto, sigue siendo un poco alta”, sostuvo Suad Ortega, allegada de los turistas.
Y es que los precios vigentes para los cocteles van de los 15 a los 24 mil pesos y el alquiler de una carpa máximo 30 mil, por lo que la cuenta tuvo que haber sido inferior a los 300 mil pesos.
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Frente a las llamadas “pruebas de masajes”, las autoridades recomiendan: “si le van a hacer un masaje establecer primero un precio; ‘que no, que le vamos a regalar la pruebita’, no, esas pruebitas se las cobran”.
Para evitar más abusos contra los turistas, a lo largo de los balnearios de la ciudad se publicaron listas de precios oficiales de alimentos, bebidas y otros servicios turísticos.
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