Las fuertes lluvias de las últimas horas en Santander generaron afectaciones en Bucaramanga y Girón. El río de Oro se desbordó, inundó varias viviendas y muchas de ellas colapsaron. Lamentablemente, un niño de 8 años murió tras la creciente del afluente.
De acuerdo con la Policía de Bucaramanga, el menor falleció tras ser arrastrado por el río de Oro en un aparente descuido de sus padres, pues el niño ingresó al agua con su hermano gemelo, quien logró ser rescatado.
En Girón, seis barrios resultaron inundados. “Pasó un vecino en una moto y empezó a pitar. Cuando nos asomamos, el río ya se había desbordado y cuando llegué a sacar los niños, el agua nos daba al ombligo”, dijo Yésica Álvarez, damnificada del barrio El Convivir.
El agua tumbó muros y dañó viviendas, muebles y enseres terminaron llenos de lodo. Muchas familias lo perdieron todo. Otro sector afectado fue el barrio La Isla, donde diez casas resultaron afectadas y las familias que las habitaban ahora deben ser reubicadas.
Estas lluvias son un coletazo de la tormenta Franklin, que deja ocho municipios con emergencias por las precipitaciones.
“Deslizamientos y pérdida de techos en Rionegro, en Barrancabermeja. En Bucaramanga hemos tenido colapso de alcantarillado, en especial en la zona norte. Hemos tenido afectaciones, por ejemplo, en Lebrija, en zonas veredales se nos ha presentado pérdida de bancada, igual que en el municipio de Cimitarra, donde, debido a la creciente del río Opón, se han presentado afectaciones, igual que en Matanza y Betulia”, informó Fabián Vargas, director de Gestión del Riesgo de Santander.
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Las autoridades en Santander realizan el censo de los damnificados en Bucaramanga y Girón para entregar las ayudas.