Un nuevo caso de intolerancia se presentó en Palmar de Varela , municipio del Atlántico. Allí, una mujer le disparó a su vecino porque sus vacas invadieron un predio. La señora quedó a disposición de la Fiscalía General de la Nación.
Los habitantes de la vereda Burrusco, en zona rural del municipio, alertaron por medio de una llamada a la Policía sobre una riña que se estaba presentando entre los vecinos y que terminó con un desenlace violento. Según testigos del hecho, el insólito caso se habría generado, al parecer, porque unas reses pertenecientes a la víctima invadieron el terreno de la mujer de 43 años.
Acto seguido, la mujer sacó un arma de fuego y arremetió en contra del hombre de 35 años, disparándole a la altura de la zona pélvica sin mediar palabras. Cuando las autoridades llegaron al lugar, lograron incautar la pistola con la que se habría cometido el ataque.
El dueño de los animales, que se encontraba herido en el piso, fue trasladado a un centro asistencial para recibir atención médica. Por su parte, la mujer fue capturada y puesta a disposición de la Fiscalía General de la Nación y donde deberá responder por los delitos de porte ilegal de armas de fuego, lesiones personales y tentativa de homicidio.
Publicidad
En otros hechos violentos del departamento, el pasado fin de semana encontraron los cuerpos de un hombre y una mujer que fueron asesinados por un arma de fuego, en el barrio Juan Domínguez Romero, del municipio de Soledad.
Según informó Blu Radio, los cadáveres fueron hallados tendidos en un viejo sofá de la vivienda de las víctimas. Según versiones preliminares, dos sujetos en una motocicleta dispararon en repetidas ocasiones contra el hombre y la mujer luego de sostener una discusión.
Los hechos están siendo investigados por la Policía Metropolitana de Barranquilla y la Fiscalía General de la Nación. Hasta el momento, no se ha confirmado la identidad de las personas que perdieron la vida en Soledad, Atlántico. Sin embargo, se dice que una de ellas responde al nombre de Miguel Ángel Conrado Castro, de 50 años, quien se dedicaba a la venta de vísceras para la elaboración de butifarras. Los delincuentes escaparon.