Autoridades en Nariño investigan la responsabilidad de grupos ilegales por las heridas que recibió una mujer de 61 años al caer en una mina antipersonal. Los hechos ocurrieron en la vereda Cualalá, zona rural del municipio de Magüí Payán.
Miembros de la Fuerza de Tarea Conjunta Hércules trasladaron por vía aérea a la víctima al hospital San Andrés de Tumaco, donde los médicos luchan por salvarle la vida.
Según las autoridades, la mina al parecer contendría un componente adicional: veneno, lo que dificulta aún más la situación de salud de la paciente.
Entretanto, el Ejército denunció que el frente Darío Gutiérrez, una disidencia de las extintas FARC, quemó un vehículo en el que se transportaban 18 militares de desminado humanitario a los que les robaron detectores de minas y prendas de protección en el departamento del Huila.
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El ataque contra los 16 soldados y dos suboficiales ocurrió cuando el grupo se dirigía al caserío Río Blanco y hombres armados, "bajo amenazas y de forma violenta, detuvieron el vehículo e hicieron descender al personal militar".
El comunicado del comando de la Brigada de Ingenieros de Desminado Humanitario del Ejército añadió que, por su labor, la tropa "no portaba armamento", pero que, sin embargo, los atacantes robaron equipos de comunicaciones y de protección, detectores e "incineraron el vehículo en el que se movilizaban". Para el Ejército, este tipo de hechos terroristas "violan los derechos humanos y las disposiciones del derecho internacional humanitario”.
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Igualmente, culpan del ataque al frente Darío Gutiérrez, que "delinque en esta región del país y sus acciones criminales no solo ponen en peligro la vida e integridad de la población y los desminadores, sino que podría interrumpir la continuidad de las operaciones de desminado humanitario".
Las unidades militares que tienen jurisdicción en este departamento desplegaron operaciones con el propósito de garantizar la seguridad de los pobladores.
El frente Darío Gutiérrez forma parte presuntamente del Estado Mayor Central (EMC), la principal disidencia de las FARC, que el pasado fin de semanaamenazó a candidatos a las elecciones locales de octubre y a políticos , tras la ruptura del cese al fuego con el Gobierno colombiano.
Las disidencias, comandadas por alias 'Iván Mordisco', consideran que la ruptura parcial del cese al fuego bilateral, que estaba vigente desde el primero de enero cuando lo anunció el presidente Gustavo Petro, en los departamentos de Caquetá, Meta, Guaviare y Putumayo "deja inválido el protocolo de cese al fuego y los compromisos asumidos por las partes".
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En mayo pasado, el Gobierno nacional suspendió de forma parcial el cese al fuego bilateral con el EMC, luego del asesinato de cuatro indígenas menores de edad que intentaron escapar tras ser reclutados a la fuerza por el frente Carolina Ramírez.
A pesar de este rompimiento, el Gobierno sigue dispuesto a instalar la mesa de diálogo con este grupo armado ilegal, liderado por personas que no firmaron el acuerdo con las FARC en 2016, aunque aún no hay fecha prevista de inicio ni interlocutores.