El 2022 fue un año en el que se habló de paz, pero paradójicamente varias comunidades estuvieron confinadas por el hostigamiento de grupos armados ilegales. Ante este panorama, la Defensoría del Pueblo informó que desde 2017, un año después de firmar la paz, y hasta el 2022, emitió 136 alertas tempranas por la presencia de las disidencias de las FARC en 237 municipios y 29 departamentos del país.
A pesar de que se habló de un cese al fuego y la posibilidad de su participación en los diálogos de paz con el Gobierno nacional, la presencia de estas facciones de las extintas FARC ha generado angustia y miedo en algunas comunidades.
Recientemente se conoció que el comando conjunto del oriente y grupo coordinador de occidente se sumaron al cese de hostilidades como gesto de paz.
Según Indepaz, la presencia del comando conjunto del oriente se concentra en los departamentos de Arauca, Caquetá, Vaupés, Guaviare, Vichada, Casanare, Huila, Meta y Putumayo. En el caso del comando coordinador de occidente, su presencia se centra en Nariño, Cauca, Huila, Putumayo, Tolima y Valle.
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Para algunos analistas, como el director de la Fundación Pares, León Valencia, la decisión del cese de hostilidades por parte de las disidencias es un alivio que las comunidades necesitan, pues residen en zonas donde “hay mucho desplazamiento, confinamiento y muertes”.
Los decretos del cese al fuego son, a juicio de los expertos en conflicto armado, la ruta a seguir para evitar el crecimiento de una crisis humanitaria.
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Jorge Mantilla, director de la Fundación Ideas para la Paz, expresó que “es fundamental que los protocolos que se deriven de los decretos ya firmados por el presidente sean explícitos en la manera en que este cese al fuego bilateral se va a traducir en una disminución del impacto humanitario”.
Para el experto, el cumplimiento de este cese al fuego deberá estar acompañado de un equipo de verificación.
Los analistas coinciden en que, aunque el cese al fuego de este grupo armado es un avance para la paz total, se deberán trazar líneas rojas para evitar incumplimientos.