La mamá de Jerónimo Angulo, el niño asesinado en Fusagasugá, al parecer por su padrastro Giovanny Andrés Díaz,
fue hospitalizada tras enterarse de la muerte del niño de 3 años.
La madre ya había declarado antes las autoridades previo a la desaparición del pequeño. Al confirmarse su muerte, la mujer salió de la Fiscalía de Fusagasugá hacia las diez de la noche del miércoles 6 de marzo y fue trasladada a un hospital por el impacto que le causó la noticia.
Según han dicho testigos, e incluso una familiar de Jerónimo Angulo, la relación del padrastro con el pequeño era de maltrato hacia el menor de edad, supuestamente porque era el único de los seis hijos de la pareja que no era de él.
El ICBF y la Policía de Infancia y adolescencia investigan si hay denuncias del supuesto maltrato al niño en Fusagasugá antes del asesinato. También indagan si sus cinco hermanitos también fueron víctimas de violencia intrafamiliar.
Mientras tanto, los menores de edad fueron sacados de su casa en el barrio Carlos Lleras, de Fusagasugá, y se encuentran bajo protección de Bienestar Familiar.
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El cuerpo de Jerónimo Angulo no ha sido entregado a su familia y las lesiones que le causaron la muerte eran evidentes en el cuerpo, tras ser hallado por las autoridades.
El niño de 3 años estaba envuelto en una lona verde, que las autoridades creen es la misma que cargó el padrastro desde su casa hasta la quebrada El Jordán, donde hallaron el cadáver del menor de edad. Esas imágenes fueron captadas por una cámara de seguridad.
De ser hallado culpable por el asesinato de Jerónimo Angulo, Giovanny Andrés Díaz pagaría, por lo menos, 50 años de cárcel sin derecho a rebaja de pena.