También encontraron que los supuestos restos del togado, que llevaban velando por años, realmente eran de Héctor Jaime Beltrán.
Desde la fatídica toma del Palacio de Justicia, el 6 de noviembre de 1985, la familia Andrade ha vivido un verdadero infierno en vida. Según la versión oficial, el magistrado (e) Julio Cesar Andrade murió durante la toma del palacio, sin embargo, imágenes de ese día desmontarían lo creído hasta el momento.
Un video captado por Programar Televisión sería la prueba que el magistrado Andrade habría salido con vida del Palacio acompañado de Fuerzas Militares y policiales que participaron de la retoma en contra del M19. El material audiovisual fue visto varios familiares de Andrade -hermanos, hijos, esposa- y todos ellos llegaron a la misma conclusión: el que salía caminando y rodeado de soldados era Julio César.
Entre lágrimas, así se refirió Gabriel Andrade, hijo del magistrado, a los pocos segundos que demuestran que su padre sí salió con vida del Palacio de Justicia: “Son dos segundos de felicidad por 33 de pavor, porque después de los dos segundos me imagino cada tortura, cada golpe, cada vejamen, cada insulto, cada humillación que pudo haber sufrido. Duele ver que mi papá salió en medio de militares y se desapareció”.
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Esta es solo una de las tristezas que ha sufrido los Andrade en los últimos meses. Hace poco tiempo, gracias a un sueño en el que el magistrado se apareció supuestamente a una de sus hijas y le decía que siguiera investigando, la familia del fallecido descubrió que el cuerpo que velaban no era el de Andrade.
Gracias a que los seres queridos del magistrado confiaron en la revelación y decidieron exhumar el supuesto cuerpo de Andrade, que estaba enterrado en un cementerio de Barranquilla, descubrieron que los restos pertenecían al empleado de la cafetería Héctor Jaime Beltrán.
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Tras estos dos duros hallazgos, la familia del magistrado Julio Cesar Andrade aseguró que no descansará hasta saber qué pasó con su padre y que ver que los responsables de su muerte y desaparición paguen.
“Quién responde en la Casa del Florero si allí ahí estaba el coronel Sánchez Rubiano y su equipo de inteligencia, Iván Ramírez y su equipo de contrainteligencia, y la Policía y el Ejército directamente en cabeza de Arias Cabrales y el señor general Mallarino. Ellos son los que tienen que responder”, dijo Eduardo Carreño, abogado de la familia, agregando: “Cómo nos van a explicar que ahora el magistrado desaparece y que la Fiscalía siga en preliminares por los desaparecidos nuevos.
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