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Siguen conociéndose escabrosos detalles de la muerte de ocho internos que estaban en las celdas de la estación de Policía de San Mateo, situada en el municipio de Soacha .
La Procuraduría General de la Nación reprochó que ese lugar tenía solo seis metros y había 11 personas en su interior.
Narda González, asistente de la Procuraduría Delegada de Fuerza Pública, leyó el testimonio que dio uno de los sobrevivientes de esa fatídica jornada.
“Los Policías dijeron ‘pues quémense’ y empezaron a mover unas llaves al frente. Yo estaba doblando las cobijas en la parte de atrás y cuando vi el fuego don Jesús Alirio entró en pánico, cogió una cobija para apagar el fuego y allí se prendió todo. Y yo empecé a saltar”, mencionó González.
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La funcionaria también reveló que en ningún momento se ordenó abrir las celdas para que las personas recluidas salieran y pudieran salvar su vida.
“Tenían conocimiento de la gravedad de la situación que se presentaba y, pese a ello, no se impartió ninguna orden para que se abriera la celda y evitar que las personas allí confinadas, inhumanamente, terminaran muertas”, concluyó González.
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La Procuraduría asegura que no se usaron los extintores que la estación tenía, además que hace falta estudiar varios videos para determinar la línea de tiempo de lo ocurrido.
Tres policías fueron citados a juicio disciplinario por lo ocurrido.
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