Para los líderes sociales del país la estrategia puesta en marcha por el Gobierno Nacional para proteger la vida de sus compañeros ha sido insuficiente. Por eso, hacen un llamado para que se revise el crudo panorama, no solo en materia de asesinatos, sino en cuanto a las constantes amenazas de las que son víctimas los defensores de derechos humanos.
“El gobierno debe dejar de negar la situación de crisis real que hay frente al tema de agresiones a líderes y asumir su obligación. Cumplir en términos de prevenir y proteger a los líderes y lideresas sociales de todo el territorio nacional”, expuso Sonia Cifuentes, vocera de la Asociación Minga.
Asesinan a líder campesino en zona rural de Argelia, sur del Cauca
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Por su parte, desde el gobierno aseguran que se adelantan varias políticas de seguridad para preservar la vida de estos defensores de derechos humanos y señala a los grupos armados que estarían detrás de los asesinatos.
"Las disidencias de las FARC son los culpables de la mayoría de crímenes de líderes sociales seguidos por el ELN, el Clan del Golfo y otros grupos como Los Caparos y Los Pelusos. En ese sentido hemos integrado cinco políticas en la lucha contra estos grupos", sostuvo el comisionado de Paz, Miguel Ceballos.
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Pero las garantías en materia de seguridad no es el único tema que enfrenta a las organizaciones sociales y al gobierno.
Las cifras sobre el número de líderes y lideresas asesinadas en Colombia en lo que va del 2020 es imprecisa. Mientras los defensores de derechos humanos dicen que van 95, el ejecutivo señala que son 49, número que se basa en datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), estamento que certifica a los líderes sociales.
Entretanto, el comisionado de Paz indicó que la Fiscalía avanza en las investigaciones de estos crímenes.
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