El pico y cédula en Barranquilla, vigente desde el primero de abril por la pandemia del coronavirus, se levantará.
Con esto, los ciudadanos podrán realizar actividades esenciales y no esenciales cualquier día de la semana, pero eso sí evitando las aglomeraciones.
Los sectores económicos también empezarán a reactivarse en Barranquilla siempre y cuando hayan registrado sus protocolos de bioseguridad, que deben ser aprobados por la Alcaldía.
El uso de tapabocas es obligatorio y están prohibidos los eventos con aglomeraciones, el funcionamiento de bares, discotecas y lugares de baile y el consumo de bebidas alcohólicas en espacios públicos o establecimientos de comercio.
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- Templos e iglesias podrán funcionar con un aforo permitido de hasta 50 personas y habiendo registrado su protocolo de bioseguridad.
- Se levanta el aislamiento preventivo obligatorio para los menores de 17 años. Sus padres deben asegurarse de que cumplan las normas del autocuidado.
- Los casinos, gimnasios y el zoológico, empresas de transporte intermunicipal e interdepartamental, Instituciones de Formación para el Trabajo y Desarrollo Humano (IETDH), entre otras, quedan autorizadas a abrir previa preinscripción y aprobación de los protocolos de bioseguridad.
“No podemos relajarnos, no hemos ganado nada. La responsabilidad individual será lo más importante y el autocuidado, la llave para preservar la vida y el empleo”, pidió el alcalde Pumarejo a los ciudadanos.
“Lávate las manos constantemente, mantén el distanciamiento físico y usa el tapabocas, que es obligatorio en todas las actividades. Su uso genera empleo y salva vidas”, agregó.