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Solo dos niñas de 10 y 12 años lograron ser sacadas con vida del río Magdalena
por su padre, una de las cuatro víctimas fatales de una tragedia familiar que viven los Bosio Díaz en el departamento del Atlántico.
Los familiares habían salido el domingo 23 de julio del barrio Viña del Rey, en el municipio de Soledad, hacia el barrio Siape, en el nororiente de La Arenosa. Su destino era una finca de la isla 1972, ubicada en el Parque Salamanca, sobre el río Magdalena.
Carlos Bosio, papá de dos niñas que se ahogaron en medio de la tragedia familiar, dijo que era “un paseíto como de familia, el compadre mío le dijo ‘sobrino, ¿se va a ir conmigo para la isla?’, y él se entusiasmó”.
Mientras se bañaban en una de las playitas que forma el río, ocurrió la emergencia.
“Las dos hermanas y el niño se estaban ahogando y llegó mi sobrino a rescatarlos, pero como que lo agarró la corriente y se fueron los dos a la profundidad”, relató Ramón Benítez, allegado de las víctimas.
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Dos niñas de 10 y 12 años alcanzaron a ser rescatadas por su padre, quien desapareció cuando intentaba salvar a sus sobrinos, otros tres menores de edad.
Las víctimas de esta tragedia familiar eran “Ricardo, Carlos Bosio, Michelle y Melanie, mis hijas… no creía esto que me iba a pasar”, expresó desconsolado el señor Bosio.
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Tras la tragedia familiar, Katherine Bolaños, comandante de la estación de Guardacostas de Barranquilla, recalcó que “el río no es un lugar para bañarse".
"En este lugar no tenemos presencia de salvavidas, por lo que la recomendación es utilizarlo de manera turística en lanchas, pero no para bañarse”, anotó.
Los cuatro cuerpos ya fueron rescatados por las autoridades.
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