Con el propósito de sacar provecho económico y evadir los controles, empresarios están programando fiestas masivas y sin medidas de bioseguridad en localidades aledañas a Cartagena , como Arjona, Turbaco y Turbana, en Bolívar.
Por eso, las autoridades están realizando caravanas para detectar estas fiestas que pueden ayudar a propagar el COVID-19 en medio de una crisis por las altas ocupaciones de camas UCI y escasez de medicamentos analgésicos en Colombia.
De hecho, en Rocha, un corregimiento del municipio de Arjona, encontraron una fiesta masiva con picó, la cual tuvo que ser suspendida y en la que se les impuso sanciones a sus organizadores.
Sobre la situación que se repite en varios municipios del departamento de Bolívar, habló el secretario de Gobierno de su capital, Cartagena.
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“No podemos permitir que unos negociantes traten de violar y vulnerar lo establecido en el protocolo de bioseguridad. Si hay sanciones, hay que imponerlas; si hay un establecimiento sancionado que abre, hay que sancionarlo definitivamente y cerrarlo de manera definitiva”, dijo David Múnera.
La fiesta mencionada no ha sido la única a la que las autoridades le han impuesto sanciones en Bolívar, pues ya se habían cerrado dos locales comerciales por sobrepasar el aforo y funcionar en horarios prohibidos en el corregimiento La Boquilla, algo que también ocurre en el norte del departamento, donde los comerciantes realizan este tipo de celebraciones masivas en los corregimientos apartados.
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