La batalla de una mujer por pensionarse tras sacar adelante a sus hijos lavando ropa

Oliva Lagos, una mujer que crio sola dos hijos y ha trabajado toda su vida lavando ropa y atendiendo un hijo con discapacidad dejándolo con una persona y con otra, consiguió ganar una pelea jurídica por su pensión.Otras noticias: Claudia Yurley Quintero fue elegida mujer Cafam 2022: su lucha ha sido contra la explotación sexual“¿Se imagina todo el día uno en el lavadero restregue que restregue?”, dice Oliva mostrando sus manos.Por eso su tristeza cuando supo que por errores en los reportes de su cotización estaba a punto de quedarse sin pensión.“Porque toda mi vida la he trabajado y prácticamente mi vida y mi salud y mi juventud se fue solo trabajando, porque yo tengo un sardino especial y ellos debían haberme cobijado por ese hijo, pero ellos no pusieron atención a nada de eso”, expresa.Oliva tuvo que emprender prácticamente una ofensiva jurídica que llegó a la Corte Constitucional, la cual determinó que son los fondos de pensiones quienes deben responder laboralmente y por tanto señaló que a ella le deben pagar su pensión.“Si hay algunas semanas que en algún momento hayan sido reportadas por la entidad y que después por alguna razón llegan a desaparecer, ese mal manejo es culpa de la entidad y no del afiliado. Quien debe probar que esas semanas nunca existieron pues será Colpensiones cuando ya hay una prueba de por medio por parte de ellos”, explica Carlos Valencia, abogado laboralista.La recomendación para Oliva y para todo el que esté peleando una pensión es que consulte su historia laboral.¿Cómo consultar mi historia laboral?“En el caso de Colpensiones, ingresa a www colpensiones.gov.co y ahí le va a dar un link donde dice historia laboral. De igual forma seguramente lo va a remitir al inicio para que se registre, se registra con su cédula, coloca una clave, ahí ya ingresa y ahí va haciendo seguimiento de su historia laboral, puede bajarla en PDF”, detalla Valencia.Colpensiones entregó la resolución para el pago de la primera mesada. Ahora Oliva espera emprender un negocio para, como dice ella, trabajar para ella misma.