Gael Santiago Salazar Ortiz tenía 15 meses y falleció en el hospital Mario Gaitán Yanguas de Soacha, Cundinamarca, el pasado domingo 25 de septiembre. Investigan si su muerte tuvo que ver con un medicamento que le administraron.
El drama para esta familia empezó el miércoles 21 de septiembre por un brote que apareció en la mejilla derecha del niño, pero días después el salpullido se había extendido a otras partes del cuerpo, por lo que fueron al centro médico.
Una pediatra “me dijo ‘vamos a darle un poquito de loratadina, no es por alergia, es porque al niño se le calme un poquito la piquiña y el desespero’”, afirmó Angi Ortiz, madre del menor.
Ella dice que lo que le suministraron al bebé “era loratadina porque lo había sugerido la pediatra, yo acepté, a mi bebé se lo dieron, se lo tomó normal”.
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Sin embargo, luego de haber permanecido seis horas en el hospital, Gael Santiago comenzó a “cambiar de color, empieza a tornarse morado, empieza a convulsionar, yo me alarmo, aviso a todos los que están ahí. Inmediatamente la pediatra me quita a mi bebé y procede ahí mismo a hacer la reanimación de mi bebé. Mi bebé había sufrido un paro respiratorio”, relató la acongojada madre.
Franklin Salazar, padre del niño, aseguró que el pequeño “solamente tenía el brote, nunca tuvo fiebre, nunca tuvo vómito, nunca tuvo soltura, no tuvo ningún otro síntoma, solamente tuvo su brotecito en la cara, no más, dormía, comía excelente”.
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El Hospital Mario Gaitán Yanguas se pronunció a través de un comunicado en el que informó:
El menor presentó complicaciones en el estado de salud. Nuestro personal médico actuó de manera oportuna, brindando maniobras de reanimación avanzada y protocolos de urgencias para salvaguardar la vida del menor
La Secretaría de Salud de Cundinamarca se apersonó del caso para saber qué fue lo que ocurrió, mientras el cuerpo del pequeño Gael Santiago se encuentra en el Hospital de Kennedy a la espera de la necropsia y definir si una dosis alta de un medicamento habría sido la causa de la muerte.
El caso del bebé recordó lo ocurrido en un centro clínico en Bogotá, donde la niña Saray Sofía Godoy
murió en agosto pasado tras recibir una alta dosis de un medicamento.