La Policía en Medellín incautó más de 1.500 litros de licor adulterado que, presuntamente, iba a ser distribuido y comercializado durante los eventos de la Feria de las Flores que inicia este viernes y se extenderá hasta el 7 de agosto.
El operativo de grupos de inteligencia y de la Unidad Nacional de Intervención Policial y de Antiterrorismo (UNIPOL), en coordinación con funcionarios del grupo operativo de la subsecretaría de ingresos de la Gobernación de Antioquia, se llevó a cabo en el barrio Campo Valdés de Aranjuez (comuna 4), nororiente de la capital antioqueña.
“El inmueble allanado estaba siendo utilizado como fachada de chatarrería, donde funcionaba un alambique clandestino, en donde se halló toda la cadena de producción y distribución hacia los municipios del área metropolitana para su venta
y consumo durante de la Feria de las Flores”, informó la Policía Metropolitana.
Además del hallazgo de más de 1.500 litros de licor adulterado fue capturada una mujer, quien se hace llamar ‘Dora’ por el delito de corrupción de alimentos.
En el procedimiento se logró la incautación de 1.200 botellas de whisky, vodka, vino y ron de diferentes marcas, 50 galones de licor listos para empacar, 1.500 botellas vacías, 35.000 etiquetas falsificadas, 10.000 tapas y 95 cajas de licor.
De acuerdo con la investigación, se pudo establecer que “esta actividad ilícita generaba ingresos mensuales por más de 100 millones de pesos”.
El licor adulterado es aquel que ha sido alterado con sustancias de dudosa procedencia, lo que puede causar graves problemas de salud en quienes lo consumen. Una de las sustancias más comunes utilizadas para adulterar el licor es el etanol, un alcohol presente en bebidas alcohólicas legales, pero que en exceso puede ser altamente tóxico para el cuerpo humano.
El etanol es un depresor del sistema nervioso central que actúa directamente sobre el cerebro, alterando las funciones motoras, sensoriales y cognitivas. Cuando se consume en grandes cantidades, puede causar desorientación, mareo, náuseas y vómitos, lo que puede llevar a la persona a perder el conocimiento o incluso a entrar en coma.
Además, el etanol adulterado puede contener otras sustancias tóxicas como metanol, acetona, cloruro de metileno, entre otras, que pueden causar daño hepático, renal, neurológico e incluso la muerte. Estas sustancias pueden afectar el funcionamiento del hígado y los riñones, causando inflamación y daño celular, lo que a su vez puede provocar insuficiencia hepática y renal.
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