Antioquia atraviesa el tercer pico de contagio, según sus autoridades. La región tiene el 82,3% de sus camas UCI con pacientes, pero el principal problema no es ese, una de las dificultades más notorias sigue siendo la falta de medicamentos.
“Hay instituciones que en concreto nos han dicho: ‘por favor no me envíe pacientes porque tengo dificultad con el abastecimiento de medicamentos’”, señaló Leopoldo Giraldo, gerente para la atención del COVID-19 en Antioquia.
El Gobierno Nacional anunció las medicinas la semana anterior, pero estas aún no llegan al departamento, que ha tenido que bloquear camas también por la falta de personal médico; hay intensivistas, pero no especialistas que atiendan las otras comorbilidades.
“Hay pacientes que adicionalmente requieren cardiólogos, neurólogos, neumología, una cantidad de subespecialidades que no las tienen todas las instituciones”, dijo Giraldo.
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Estos dos aspectos tienen al departamento con una lista de espera de cerca de 60 pacientes.
“Hemos buscado remitirlas a otros departamentos, pero las familias se oponen a eso”, manifestó Luis Fernando Suárez, gobernador (e) de Antioquia.
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Caso distinto al de un joven de 17 años con enfermedades de base que debió ser llevado al Atlántico.
“Es un paciente joven, con unas comorbilidades previas que necesitaba una cama de cuidados intensivos con ciertas subespecialidades adicionales que en el momento no estaba disponible y la EPS, teniendo disponibilidad, contrató en Barranquilla y traslada el paciente”, explicó Giraldo.
Hasta este momento, Antioquia tiene una disponibilidad de 230 camas de cuidados intensivos.