Juan Guillermo Zuluaga, gobernador del Meta
, cuestionó la parte del discurso en la que el presidente Gustavo Petro, durante la instalación del Congreso de la República, señaló que "se está acabando la guerra entre Estado e insurgencias".
Su crítica vino tras el atentado que sufrieron seis soldados que hacían patrullajes en el municipio de Vista Hermosa. “Al paso de ellos les lanzaron un artefacto explosivo”, indicó Zuluaga. Producto del ataque, tres uniformados “resultaron muy heridos, ya fuera de peligro afortunadamente”.
Sobre las palabras del presidente Petro, el gobernador señaló que el fin de la guerra “es el mayor anhelo que tenemos todos, pero en el departamento del Meta lo que está pasando es que se está intensificando. Las disidencias de las FARC siguen atacando no solamente al Ejército, a la Policía, sino también hostigando a la población civil con muchos hechos: secuestros, extorsiones, reclutamiento”.
“Aquí no está pasando lo que está diciendo el señor presidente y nos gustaría mucho que venga a la zona, que el comisionado de paz y la Defensoría del Pueblo vengan y lo verifiquen por ellos mismos”, sentenció.
Además de este hecho violento, el gobernador del Meta denunció que “hombres armados de las disidencias llegaron a un internado del municipio de Uribe a hacer adoctrinamiento, separaron los muchachos de los profesores”.
“Que ingresen hombres armados a las instituciones educativas es una violación flagrante al derecho internacional humanitario. Además, dos niñas de 14 años se las llevaron, no las encontramos, están desaparecidas”, agregó.
Aunque no se lo ha atribuido directamente, las disidencias de las FARC son el único grupo al margen de la ley que delinque en esa zona.
Más del discurso de Gustavo Petro
Además de señalar que "la guerra entre la insurgencia y el Estado colombiano ha llegado a su fin", el presidente Gustavo Petro alertó que la violencia está transitando hacia una nueva fase que tiene que ver "con un control territorial y de riqueza, no de toma del poder".
"Se está acabando la guerra entre Estado e insurgencia, que es la que produce las bajas", en la fuerza pública, dijo Petro, que en este punto fue tachado de "mentiroso" desde la bancada de oposición.
El mandatario ensalzó el cese el fuego bilateral alcanzado con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) que entrará en vigor el próximo 3 de agosto, producto de las negociaciones de paz, y aseguró que las iniciativas emprendidas en el último año "han traído como resultado una disminución sustancial" en el número de bajas del Ejército y la Policía respecto al año pasado, de un 60 % y un 55 %, respectivamente.
En lo referente a la guerra contra las drogas, indicó que el crecimiento de los cultivos de coca se ha detenido y han disminuido los envíos de drogas a Estados Unidos, pero "aparece otro desastre en el horizonte", que es que "en regiones cocaleras hay hambre".
"La geografía del mercado de las drogas varió porque el consumo en los Estados Unidos cambió de estructura, de mal en peor, de la cocaína pasó al fentanilo", dijo el mandatario, quien agregó que este opioide es 50 veces más adictivo que la heroína, lo que en cierta forma puede beneficiar a la paz de Colombia, que "no parece tener capacidad competitiva en el mercado del fentanilo".
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