La filtración de contratos que el Gobierno firmó de manera confidencial con las farmacéuticas Pfizer y AstraZeneca para la compra de vacunas contra el coronavirus sigue generando incertidumbre sobre la futura compra de nuevos biológicos.
Mientras que el Gobierno avanza en reuniones con las farmacéuticas, el caso llegará a manos de la Fiscalía General de la Nación.
“Los riesgos existen en que estamos haciendo la negociación con las farmacéuticas para lo que viene, para lo que sería la tercera dosis, son las dosis para el año 2022 y sobre esto se genera todo un ambiente de incertidumbre”, manifestó el director administrativo de la Presidencia, Víctor Muñoz.
Tras las conversaciones con la farmacéutica Pfizer, la situación será escalada internacionalmente.
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“Recordemos que este es un contrato firmado a nivel internacional, no es un contrato que se rige por las leyes de Colombia, es un contrato que se rige en este momento bajo la legislación de Nueva York”, agregó el funcionario Muñoz.
Sin embargo, el equipo jurídico de la Casa de Nariño estudia la filtración para eventualmente poner el caso en manos de autoridades judiciales.
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“Yo creo que no se puede descartar ningún tipo de acción porque claramente se trata de información confidencial y que puede poner en riesgo el desarrollo del plan de vacunación. Por eso, estamos trabajando rápidamente con las farmacéuticas para evitar que esto afecte la circulación de más vacunas en el territorio colombiano”, declaró el presidente Iván Duque.
Se contemplan reuniones con Moderna y el mecanismo Covax para el día de mañana.
Por lo pronto, el Consejo de Estado, entidad donde se produjo la filtración, pidió a la Fiscalía y a la Comisión Nacional de Disciplina Judicial realizar las investigaciones pertinentes.
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