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En Medellín no paró de llover durante toda la madrugada. Las alarmas del sistema temprano de alertas hacían temer lo peor. Cerca de 160 llamados de emergencia pusieron en alerta a los organismos de socorro, en donde el caos en varios sectores empezó al final de la tarde del lunes, justo a la hora del retorno de la comunidad a sus casas.
En el deprimido de San Juan, los pasajeros de un bus resultaron atrapados dentro del vehículo por la corriente súbita que generó el exceso de agua. Varias personas tuvieron que ser rescatadas por el techo del bus.
Manrique, Santo Domingo, Pedregal y Santa Cruz fueron algunos de los sectores más afectados. Sus habitantes pasaron la noche tratando de rescatar sus pertenencias, mientras la corriente se llevaba todo a su paso y en el agua flotaban los enseres.
La parroquia La Valvanera, en Pedregal, también sufrió el embate de las aguas que, en poco tiempo, se metieron a las instalaciones. Los mismos feligreses tuvieron que acudir ante el llamado de ayuda de los sacerdotes.
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Por lo menos 30 viviendas del barrio Santa Cruz, sector La Playa, también resultaron seriamente afectadas y la comunidad asegura que la emergencia dejó tres lesionados.
La zona norte de la ciudad fue la más afectada, según el reporte de los organismos de atención de desastres, en los barrios Santo Domingo, Granizal, La Francia y Moscú. Además, las comunas Popular, Manrique, Castilla, Doce de Octubre y robledo sufrieron inundaciones.
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