Ronald Rojas , firmante de paz, recibió dos impactos de arma de fuego que cegaron su vida. Era más conocido como Ramiro Durán y venía liderando procesos significativos para el avance en la reincorporación de varios hombres y mujeres que decidieron abandonar las armas.
“Se ofrece una recompensa de hasta 30 millones de pesos para quienes nos brinden información sobre los responsables del asesinato”, señaló Luisa Robles, secretaria de Gobierno (e) de Neiva.
Una comisión especial procedente de Bogotá llegó a Huila para ponerse al frente del caso.
“Con la Fiscalía General de la Nación se adelantan todas las actividades de indagación y recolección de material probatorio y evidencia física que permita identificar e individualizar a la persona o personas responsables”, dijo el coronel Diego Fernando Vásquez, comandante de la Policía Metropolitana de Neiva.
Publicidad
“Hacía parte de la Mesa Autónoma de Reincorporación, desarrollaba algunos proyectos de la Gobernación y el Ministerio de Cultura alrededor de temas productivos y era un referente para muchas personas que habían decidido apostarle a la paz”, indicó Diego Tello, asesor de paz del Huila.
El cuerpo sin vida del firmante de paz es velado en el Colegio Nacional Santa Librada, institución donde cursó varios años de estudio.
Publicidad
“Aquí lo que tenemos que hacer es un llamado vehemente al Estado colombiano que, a estas alturas, luego de cuatro años, nunca pudo garantizar la seguridad ni la vida de los firmantes de paz”, manifestó Victoria Sandino, senadora.
En un consejo de seguridad realizado en las últimas horas, las autoridades se plantearon la necesidad de fortalecer la seguridad de firmantes de paz y líderes sociales.