El Ejército colombiano ha desplegado a más de 3.000 hombres y mujeres hacia regiones de conflicto como Cauca, Chocó y sur de Bolívar. En un emotivo acto de despedida en el fuerte militar de Tolemaida, las familias, entre lágrimas y orgullo, vieron partir a los uniformados que se preparan para intensas misiones en zonas de alta tensión para capturar a los cabecillas que atemorizan la región.
Despliegue militar
Más de 3.000 miembros del Ejército colombiano han sido enviados a zonas críticas como Cauca, Chocó y sur de Bolívar para enfrentar los desafíos de seguridad en estas regiones. El despliegue se realizó tras rigurosos entrenamientos destinados a ubicar y capturar a los líderes de grupos armados que atemorizan a la población.
Emotiva despedida de miembros del Ejército en Tolemaida
La despedida de los soldados se llevó a cabo en el emblemático campo de paradas del fuerte militar de Tolemaida. Las familias, entre lágrimas y orgullo, se despidieron de sus seres queridos en un acto lleno de disciplina y emoción. "Las lágrimas de alegría, de felicidad, de orgullo... No ha sido fácil, pero de todas maneras hemos luchado y él se ha mantenido", comentó Carmen Gil, madre de un suboficial ascendido.
Carmen Gil expresó con emoción: “Le entregamos esta personita especial a Colombia para que defienda nuestra patria. Es mi nieto, hijo, yo lo he criado y lo tengo aquí, lo adoro y Dios me lo bendiga y a todo este grupo de jóvenes que se han dedicado con paciencia y esmero”.
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Declaraciones del comandante del Ejército
El general Luis Emilio Cardozo, comandante del Ejército de Colombia, destacó la importancia del despliegue: “Es lo que hoy va a fortalecer nuestras unidades. Este personal oxigena el mando y control del Ejército en las diferentes regiones de Colombia y son parte de los líderes tácticos que son tan importantes en la conducción y entrenamiento de las tropas”.
Compromiso y juramento
En una ceremonia llena de solemnidad, 3.152 suboficiales y soldados profesionales juraron retomar el control en las regiones asignadas. Con la mirada fija en la bandera de Colombia, los soldados se comprometieron a cumplir su misión con la confianza en que Dios les otorgará la victoria.
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El despliegue de estas tropas marca un paso crucial en la estrategia de seguridad del país, mientras las familias se preparan para esperar el regreso de sus seres queridos con la esperanza de un trabajo bien hecho.