La tradicional Loma de La Cruz en Cali fue uno de los puntos de concentración donde miles de manifestantes pacíficamente alzaron su voz en la tercera jornada de paro nacional .
Unidos con cantos, banderas y pancartas, miles de caleños le dijeron no a la reforma tributaria . Más tarde, en otro punto de concentración, conocido como Puerto Resistencia, otra gran multitud entonaba el himno nacional con júbilo y firmeza.
Cayó la noche y, con ella, por tercera vez consecutiva, empezaron a sonar las cacerolas. Sin embargo, al mismo tiempo, en el oeste de la ciudad, lo que retumbaba eran los disparos.
Encapuchados intentaron ingresar a un establecimiento comercial de la zona y fueron retirados de la zona con ráfagas.
Publicidad
Cerca de las nueve de la noche volvieron los disturbios, pues manifestantes y fuerza pública se enfrentaron en el nororiente de la capital del Valle del Cauca. Estallidos, humo y gritos empañaron el panorama.
Ante la crítica situación de orden público en la ciudad, el alcalde Jorge Iván Ospina le hizo un llamado al presidente de la República, Iván Duque.
Publicidad
“Señor presidente, la reforma tributaria está muerta, que no nos provoque más muertos. Por favor, retírela, se lo solicito en nombre del pueblo de Cali”, aseguró.
Lanzando piedras, y como si se tratara de campo de batalla, algunas calles se convirtieron en corredores de desórdenes y las casas en trincheras. Al menos dos bancos fueron atacados y a uno de ellos le prendieron fuego.
Pasada la medianoche, los desmanes continuaron y una estación del MIO en el oriente de la ciudad fue vandalizada. Durante el día, según reportó Metrocali, también se registraron ataques a otras dos estaciones y dos terminales del sistema de transporte masivo.
Publicidad
Estos hechos violentos contra el MIO mantienen suspendido el servicio del sistema desde el pasado jueves.
Defensores de derechos humanos denunciaron que 14 personas murieron en la jornada de protestas del viernes , mientras el alcalde de Cali confirmó solo una muerte.
Publicidad
Las pérdidas por los daños superan, de acuerdo con el cálculo de las autoridades locales, los 80 mil millones de pesos.